(contiene spoilers)
Episodio muy divertido de "Allí Abajo", que se ha beneficiado enormemente de haber trasladado mayoritariamente la acción al norte, donde se encuentran los mejores personajes y las mejores tramas de largo.
Muy curioso el giro de guión de la "muerte" de don Benjumea y muy fan de esa herencia compartida entre Maritxu y Cristóbal (algo que puede dar mucho, muchísimo juego, estoy segura).
Han pasado cinco meses desde su boda y Carmen se ha trasladado a San Sebastián a vivir con Iñaki para que éste cumpla su sueño de trabajar como aprendiz en el restaurante de Arzak.
Sin embargo, para ninguno de los dos está siendo un periodo fácil ya que Carmen no consigue adaptarse al norte (ni al clima, ni a estar todo el tiempo rodeada por la cuadrilla y la familia de Iñaki y para colmo no encuentra trabajo) e Iñaki está constantemente en guerra con otra aprendiz del restaurante llamada Gotzone, con la que se juega el puesto y que no duda en utilizar todo tipo de trucos sucios para desacreditar a Iñaki y su trabajo.
Eso si, al menos han conseguido su parcela de independencia, al negarse a ir a vivir con Maritxu al caserío y alquilar una buhardilla encima del Kaia, aunque claro, con la cuadrilla todo el día metida allí tampoco es que dispongan de demasiada intimidad.
Hablando de Maritxu, nos enteramos de que ella y don Benjumea se han casado y se han ido de luna de miel por el Amazonas. De hecho, el episodio empieza con ellos dos viajando en globo y con don Benjumea cayendo de él para horror de Maritxu (a lo largo del episodio nos darán un flashback en que se les ve a ambos partir de viaje).
Volviendo a la línea temporal actual, han pasado cuatro meses desde la desaparición de don Benjumea y tal y como quería Maritxu (que pensaba que ya no se podía alargar más lo inevitable) y en contra de la opinión de sus hijos, un juez certifica su fallecimiento, lo que hará que toda la familia y Jozé sean convocados por el abogado de don Benjumea a la lectura del testamento.
Allí nos enteraremos de que don Benjumea le ha dejado el cortijo a su hija Eugenia y la clínica (de la que sorprendentemente también era propietario) a medias a Cristóbal y a Maritxu para que la administren entre los dos, lo que lógicamente horroriza a ambos enormemente.
Además, Jozé también recibirá un regalo de su amigo, unas tierras en el norte, lo que vendrá muy bien ya que después de fingir una baja y ser pillado por Trini, ésta casi le ha puesto de patitas en la calle. Vamos, que Jozé se nos va también para el norte.
En paralelo, también nos enteraremos de que la hermana de Trini ha dejado a Jozé, aunque éste no lo sabrá realmente hasta que Trini, en uno de sus arranques de mala leche habitual se lo termina soltando.
Por otro lado, Dolores va a visitar a Carmen al norte y se toma como reto personal el ayudarla a encontrar un trabajo, aunque los resultados terminarán siendo francamente desastrosos ya que, el traductor de euskera del google no es demasiado fiable (o más bien, Dolores y Carmen no saben cómo pronunciarlo para que el teléfono lo entienda) y Carmen termina viéndose metida en un concurso de levantamiento de piedras.
Siguiendo en le norte, vemos como a Bego le ha dado por preocuparse excesivamente por la salud de Sabino y le da a beber a todas horas un brebaje totalmente infumable para que le depure el cólon y cómo Izaskun le está sacando todo lo sacable a Koldo, incluida una casa de campo que sólo utilizaba él y que era su refugio. De hecho, para tocarle aún más las narices, Izaskun manda pintar la casa de color salmón.
Sin embargo, al final del episodio, Izaskun le hará una oferta bastante sorprendente a Koldo, le devolverá su casa de campo, a cambio de que le done su sémen para tener un hijo, oferta que Koldo terminará aceptando.
El episodio me ha gustado mucho. No se si porque echaba de menos la serie o por el traslado de la acción al norte, donde están los mejores personajes o quizá porque los momentos en los que han estado en el sur, los personajes que allí quedan han sido muy bien utilizados.
Vamos, que ni me ha molestado el padre de Carmen y Cristóbal me ha hecho mucha, mucha gracia. De hecho, tengo muchas ganas de ver cómo desarrollan la trama de Maritxu y Cristóbal como propietarios de la clínica porque puede dar muchísimo juego.
De los cambios en el sur, quizá lo que menos me haya gustado es el nombramiento de Angela como jefa de enfermeras porque es uno de los personajes que menos gracia me hacen de toda la serie.
Eso si, muy fan de que parece que hemos por fin perdido de vista a la insoportable hermana de Trini, porque ésta, con todo lo bruja que es muchas veces, mola, pero es que la hermana era totalmente inaguantable.
En otro orden de cosas, todas las tramas vascas me han parecido geniales y la incorporación de Gotzone, de momento, me parece un acierto (aunque es verdad que como siga así muchos episodios puede terminar resultando cargante).
Me ha gustado mucho el papel de Carmen como pez fuera del agua en Euskadi y es de las veces que mejor he visto a María León en la serie. Muy divertida la trama de ella y Dolores buscando trabajo en Euskadi y genial el momento de Carmen como levantadora de pesas con toda la cuadrilla mirando.
Sabino y Bego siguen siendo un epic win juntos y por separado y la trama de Koldo e Izaskum teniendo un bebé juntos con lo mal que se llevan ahora también puede dar mucho juego.
Eso si, me ha dado mucha pena por don Benjumea, que era uno de mis personajes favoritos, aunque al haber dejado su muerte en el aire, todavía tengo esperanzas de que reaparezca más adelante.
Por cierto, muy bonito el detalle de acordarse de Jozé en su testamento, porque era totalmente cierto que Jozé se comportaba más como un hijo que los suyos de verdad.
En fin, veremos qué pasa en los próximos capítulos.
LO MEJOR: El traslado de la acción principal al norte, Maritxu y Cristóbal teniendo que trabajar juntos
LO PEOR: Que el personaje de Gotzone en principio puede estar bien pero cómo abusen de él puede terminar cansando
PUNTUACIÓN: 9/10
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