(contiene spoilers)
Madam Secretary es un procedural político, muy del estilo de "The West Wing" (aunque con más partes dedicadas a la vida familiar de la protagonista y al lado procedural que la serie de Aaron Sorkin), emitido por la CBS y que va a empezar a empezar este otoño su tercera temporada en EEUU.
La protagonista es Elisabeth McCord (Téa Leoni), una ex agente de la CIA que al comienzo de la serie se había retirado para dar clases en la universidad y vivir tranquilamente en una granja acompañada de su marido Henry (Tim Daly) también profesor y de sus tres hijos Stevie, Allison y Jason.
Sin embargo, el repentino fallecimiento en accidente de avión del Secretario de Estado Marsh hace que su antiguo jefe en la CIA, ahora convertido en presidente Conrad Dalton (Keith Carradine), la mande llamar para pedirle el favor de que asuma el puesto. Elisabeth aceptará el ofrecimiento y abandonará su tranquila y apacible vida en la granja para ocuparse de crísis internacionales de todo tipo.
A lo largo de la temporada la veremos adaptándose al puesto, ya que ni los líderes extranjeros ni el jefe de gabinete de Dalton, Russell Jackson (Zeljko Ivanek) ni sus propios colaboradores a los que, salvo a su secretario personal Blake (Erich Bergen), ha heredado del secretario Marsh, se lo pondrán nada fácil.
El equipo de Elisabeth está compuesto, además de por el ya mencionado Blake, por Nadine Tolliver (Bebe Neuwirth), jefa de gabinete eficiente y diligente que había tenido una relación muy cercana con el secretario March, Matt Mahoney (Geoffrey Arend) de comunicaciones, Daisy Grant (Patina Miller), secretaria de prensa y Jay Whitman (Sebastian Arcellus), asesor político. A todos ellos se los terminará ganando para su causa, aunque con algunos encontronazos en el camino.
Además del incidente internacional que funciona como "caso de la semana", en esta temporada también veremos una investigación paralela de la muerte del Secretario Marsh que llevan a cabo Elisabeth y sus antiguas compañeras de la CIA sobre todo a raíz de la muerte de otro amigo que sospechaba que la muerte de Marsh no había sido un accidente.
Esta trama se complicará bastante (sospechando incluso de la implicación del presidente) y en ella también se implicará Henry del que nos enteramos que no sólo es un profesor de religión de fama mundial sino también que había sido piloto en el ejército y que había hecho algún trabajo para la CIA (de hecho esto último tendrá su propia trama en la serie).
Por otro lado, también nos mostrarán la difícil adaptación de los hijos de Elisabeth a su nuevo entorno, sobre todo de Stevie, la mayor, que deja sus estudios para trabajar de camarera y que toma unas cuantas decisiones que no hacen muy felices a sus padres.
El final de temporada, con el desenlace final de la trama de Marsh, resulta bastante agridulce y hace que Elisabeth se de cuenta de que la política exige tragarse sapos mucho más gordos de los que se habia imaginado en un principio.
La serie está entretenida y ha ido mejorando bastante a lo largo de la temporada ya que al principio todo parecía salirle siempre bien a Elisabeth y sus chicos (lo que resultaba del todo irreal) pero en la segunda mitad de la temporada han ocurrido cosas bastante inesperadas y que han elevado el nivel de la serie.
Esta desde luego no es una serie de culto, pero se deja ver muy bien, la mayoria de sus personajes resultan agradables, los actores están muy bien elegidos y la trama troncal de la serie ha estado bien desarrollada, con unos giros bastante sorprendentes e inesperados.
Tea Leoni, Tim Daly, Bebe Neuwirth, Erich Bergen y Zeljko Ivanek me han gustado mucho tanto ellos como sus papeles (sobre todo Téa Leoni, de la que nunca he sido muy fan, está estupenda), lo que ha ayudado a que la serie me haya enganchado mucho más . Por cierto, muy fan de cómo se conserva Tim Daly, que tiene 60 años y aparenta como 10-15 años menos de los que tiene.
Eso si, también hay personajes que me chirrían un tanto como el del presidente, que dependiendo del episodio cambia el carácter (Keith Carradine está muyyyyy desaprovechado) o Matt, que resulta francamente repelente a ratos.
Aunque desde luego ninguno de ellos me carga tanto como Stevie, a la que han dado demasiado protagonismo y cuyas historias aparte de bastante aburridas y tópicas, cortan bastante las partes interesantes de la serie.
Por otro lado, hay tramas que no termino de ver y que me han obligado a aplicar un poco demasiado el suspension of desbelief, como por ejemplo que Henry empiece como simple profesor de religión y vayan añadiéndole "habilidades" a lo largo de la temporada hasta verle convertido en espía honorario. Henry y Tim Daly molan pero eso lo podrían haber explicado desde un principio y habría quedado algo más creible.
También resulta un poco de aquella manera la forma en la que Elisabeth arregla determinadas situaciones (vamos, que en la vida real no tiene pinta de que se den esas situaciones), pero aceptaremos pulpo como animal de compañía.
Además, peca de tener tramas menores bastante poco interesantes (como todo lo relacionado con Matt/Daisy o los mil y un lios de Stevie), a las que dan excesivo protagonismo mientras que otras tramas menores con más potencial (todo lo relacionado con Nadine) a las que dan mucha menos importancia.
En resumen, esta es una serie que no ganará premios (se parece a "The West Wing" sólo en su visión "amable" de la política), pero que, si te gustan las series políticas estilo procedural con personajes agradables y con una protagonista que cae bien, te hará pasar un buen rato.
LO MEJOR: El desarrollo de la trama troncal de la serie, Elisabeth es una protagonista con la que se puede empatizar, la mayoría de los personajes caen bien
LO PEOR: Que Henry a última hora parezca McGiver, el excesivo protagonismo que le dan a Stevie, la volubilidad del presidente
PUNTUACIÓN: 8/10
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