(contiene spoilers)
Buen episodio, aunque sin ser espectacular, de "Elementary" para comenzar su quinta temporada.
En él, vemos como Sherlock y Joan se enfrentan a un caso en el que un asesino se dedica a poner bombas y matar a gente de forma indiscriminada en los lugares más insospechados.
Sin embargo, esto no es lo único "peculiar" del caso, ya que este asesino ha estado seis años sin matar y ha reanudado su actividad criminal de la noche a la mañana.
En una de las escenas del crimen, Sherlock ve a un hombre que le parece sospechoso y que echa a correr cuando se da cuenta de que Sherlock se ha fijado en él.
Esto hace que Sherlock a su vez eche a correr para intentar detenerle y termine siendo atropellado por un coche.
Lógicamente, el sospechoso termina escapando pero durante la persecución Sherlock se da cuenta de que ha apoyado la mano en un taxi y con esto consigue unas huellas que les dan una coincidencia en el sistema, la de un agente inmobiliario que pasó cuatro años en la cárcel por atropellar y matar a un hombre estando bajo la influencia del alcohol.
Cuando la policía lleva a comisaría a declarar a este hombre, él niega haber cometido los asesinatos y el haber huido de Sherlock, achacando el que su huella esté en el taxi, a que hubiera cogido dicho taxi en algún otro momento.
Además, el hecho de que el asesino dejara de matar justo durante el periodo en el que él estuvo en la cárcel no parece apoyar su versión.
Sin embargo a lo largo de la investigación, la policía llega a la conclusión de que él no es el asesino ya que el último de ellos tiene lugar mientras la policía tiene al sospechoso bajo vigilancia.
Pero Sherlock no termina de creer que el hombre sea inocente y en cambio es más favorable a pensar que existen dos asesinos, algo que finalmente más o menos se confirmará cuando el compañero de prisión al que el agente inmobiliario había contratado en su empresa como favor, termine resultando ser el asesino y se descubra que su motivo para reanudar sus crímenes fue que el agente inmobiliario le ofreció un trato para que lo hiciera en lugares que favorecieran su inversión.
En otro orden de cosas, vemos como Sherlock le plantea a Joan si, dado que en sus anteriores ocupaciones, se terminó cansando de ellas y buscando nuevas emociones al cabo del tiempo, se está cansando de su trabajo como detective.
Evidentemente este comentario no es por qué si, sino que Sherlock ha observado que Joan está rara y ésta efectivamente le confirma que se está planteando cosas (sobre todo después de toparse durante la investigación con un antiguo paciente), aunque finalmente decida continuar como detective.
El episodio me ha gustado aunque me ha resultado "flojito" comparado con el primer episodio de otras temporadas.
El caso no ha estado mal y la crisis existencial de Joan tiene sentido (aunque se la hayan sacado un poco de la manga para incluir una trama personal en el episodio). A ver como avanza su relación con su antiguo paciente porque no parece que éste sea demasiado trigo limpio (a la escena con la pistola me remito).
Tampoco hemos tenido ninguna mención de Morland en este episodio, algo que yo personalmente estaba esperando viendo como terminó la temporada pasada.
Además, Gregson y Bell han tenido muy poco protagonismo y he echado de menos que, en un episodio con ausencia de personajes recurrentes habituales, ellos tuvieran algo más que hacer.
En fin, veremos que nos plantean esta temporada.
LO MEJOR: Buen caso de la semana
LO PEOR: Lo sosito que ha resultado todo
PUNTUACIÓN: 7/10
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