(contiene spoilers)
De verdad que no se ni cómo definir este episodio de Hawaii Five O. Bueno si, ¡¡lo random al poder!!¿En serio que después de todo el tiempo que nos han hecho perder con el inefable Gabriel no tenían otra forma algo más épica de matarle?
Vale que Gabriel en sí mismo era un villano random, un Wo Fat wannabe con menos carisma que la suela de un zapato, pero que sea un yonki el que le asesta el disparo mortal y que su muerte ocurra fuera de cámara y nos enteremos de pasada gracias a una conversación entre Chin y Steve me ha parecido surrealista y una tomadura de pelo teniendo en cuenta lo muchísimo que hemos tenido que soportarle. Pero si ha tenido más backstory que la mitad de los personajes principales.
Además, el episodio no es que haya tenido demasiada trama, la verdad. Ha sido casi tan random como la muerte de Gabriel.
El equipo recibe un chivatazo del lugar en el que se esconde Gabriel, un fumadero de opio con bastante mala pinta y en el que, cuando van a revisarlo, se encuentran con un yonki muerto y con Gabriel malherido a causa de un disparo infligido por el yonki.
Si, el villano más chungo, maquiavélico y calculador de las dos últimas temporadas, que no moría ni a tiros y que estaba metido en toda actividad delictiva que se llevara a cabo en la isla, herido de muerte por un yonki. Tal cual.
Pero los miembros del equipo no son los únicos que descubren el lugar donde se oculta Gabriel, sino que, gracias a los oficiales a los que tiene a sueldo dentro de la policía, Michelle Shioma también se entera y manda a su gente al fumadero a matar a Gabriel con órdenes explicitas de que esto tiene que ocurrir y si se tienen que cargar a los cansinos del Five O que están metiendo sus narices en donde no les importa, pues sin problema.
Es por esto que el noventa por ciento del episodio se resume en un interminable tiroteo entre el equipo y la gente de Michelle Shioma (en serio, ¿cuánto dinero en munición falsa han tenido que gastarse los de esta serie para recrearlo?), todo mientras mueven como pueden a Gabriel que cada vez está peor.
Finalmente, la aparición de Grover y de un montón de efectivos de las unidades especiales de la policía en escena decantarán la balanza en favor del Five O, aunque su victoria es parcial, porque Michelle Shioma ha huido antes de que pudieran detenerla y Gabriel muere en la operación, con lo que se va al traste el sueño dorado de Chin de verle pudrirse en la cárcel.
A todas estas, el agente del FBI de Abbie ya no es tan malo porque decide ayudar al Five O en el operativo para poder capturar a Gabriel. Aquí me surge la duda de cómo es posible que Abbie siga trabajando con este señor después de la insubordinación manifiesta de unos episodios atrás.
Por cierto, antes de entrar en el quirófano, Gabriel le pide a Chin que se ocupe de su hija en honor a la memoria de su hermana. Y tras la muerte de Gabriel, Chin decide honrar su promesa, algo que Steve no termina de ver claro.
En otro orden de cosas, vemos como Max le cuenta a Steve que se ha pedido una excedencia de tres meses para irse a colaborar con "Médicos sin fronteras". Se supone que Max debe presentarle su carta a su superior directo pero él ha preferido enseñársela primero a Steve (que mola más seguro).
Ante este detalle de Max, Steve se mostrará honrado y le felicitará por su iniciativa. Vale, visto esto, Masi Oka va a aparecer menos y nada en los siguientes episodios.
El episodio ha sido esperpéntico a más no poder y no en plan esperpéntico molón como son algunos episodios de esta serie y que hacen que uno se lo pase pipa, sino esperpéntico de dar pena.
Para empezar, el tiroteo se ha hecho interminable y repetitivo. Por lo menos se han tirado con él 35 de los 42 o 43 minutos que dura el episodio. A última hora ya ni distinguía entre buenos y malos y hasta me daba igual quien ganara, sólo quería que dejaran de pegar tiros.
Abbie no me cae mal pero no termino de entender qué pinta en la serie y que pierdan tiempo con ella en lugar de darles más minutos al resto de personajes de la serie. Por no hablar de lo incongruente del papel del jefe de Abbie en este episodio. Pero, ¿este señor no odiaba a los del Five O? Mi no entender.
Luego ha estado lo de Gabriel, que ya he comentado antes pero que ha sido un despropósito de proporciones descomunales. A ver, no el hecho de que muriera (que yo lo estaba deseando porque era un villano soso a más no poder y Michelle Shioma mola mucho más como mala, malosa suprema) sino que todo fuera tan sumamente cutre.
Lo de que Chin iba a terminar ocupándose de la hija de Gabriel se lleva viendo venir desde que apareció la niña.
Creo que lo mejor de todo el episodio ha sido la epifanía de Max que le hace apuntarse como voluntario en Médicos sin fronteras, aunque eso quizá signifique que vayamos a ver menos a Masi Oka en la serie.
En fin, esperemos que el próximo episodio sea al menos entretenido porque este ha sido aburrido y cansino hasta la extenuación.
LO MEJOR: La mini trama de Max, que nos hayamos librado de Gabriel
LO PEOR: Todo lo demás
PUNTUACIÓN: 3/10
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