(contiene spoilers)
Este ha sido uno de esos episodios que hacen que a esta serie no se la pueda sino querer. Es el suspension of desbelief hecho serie. En serio, muy fan de que tanto la trama principal como la trama secundaria sean "casos" que nuestros chicos se encuentran al azar y que como son más guays que nadie, resuelven en cero coma y sin ayuda de nadie porque ellos lo valen.
En la trama principal tenemos a Steve que, siguiendo los consejos de todo el mundo (en especial de Grover que parece creerse la reencarnación del doctor amor o algo por el estilo y no para de intentar que Steve salga con chicas), ha conocido a una chica llamada Lynn y como Steve es Steve, en lugar de invitarla a tomar café en una primera cita, como todo hijo de vecino, decide llevársela en bote a una isla supuestamente desierta.
De todos modos, a la chica también le mola el plan porque es hija y nieta de pescadores. De hecho, ella fue la que sugirió la isla por ser un lugar al que su familia llevaba de pequeña. Pero claro, como al pobre Steve la vida no le da un respiro, allí se encontrarán con un peligroso criminal, al que las autoridades habían dado por muerto ya que, en teoría, su avión se había estrellado cuando era trasladado desde Filipinas a Estados Unidos.
Sin embargo, el criminal estaba vivito y coleando porque había sobornado a los agentes del FBI que lo custodiaban y se había refugiado en la isla desierta a la que deciden ir de excursión Steve y Lynn.
A partir de aqui, el criminal y su novia intentarán matar a Steve y a Lynn para evitar que revelen el hecho de que está vivo y nos tiramos los cuarenta minutos de capítulo con una persecución muy molona por la isla en la que la pobre Lynn se lleva la peor parte al darse un buen golpe en la cabeza y acabar con trozos de la camisa de Steve a modo de cinta del pelo enrollándole la cabeza (a mi, todo lo que sea que Steve pierda prendas de ropa me parece correcto así que a pesar de que me de pena la pobre Lynn, su coscorrón en la cabeza ha ayudado al bien mayor que es ver los brazos de Steve en todo su esplendor).
Finalmente, y como era de esperar, Steve terminará reduciendo al criminal y su novia y el plan no le saldrá tan mal porque a pesar de la odisea Lynn le dirá a Steve que la llame cuando quiera (que es una contusión en la cabeza en comparación con Steve en todo su esplendor de navy seal molón).
En otro orden de cosas, Chin se lleva a Grover y a Kono a un partido de rugby de un equipo de instituto al que suele ir a ver. Kono está bastante aburrida (a estas alturas todavía no entiendo cómo se ha dejado convencer para ir) y la cosa resulta un tanto intrascendente hasta que Chin se da cuenta de que la estrella de su equipo ha empezado a fallar pases que normalmente no fallaría.
Esto hace que Chin (que, en caso de dudas, siempre se pone en lo peor), se huela que algo raro está pasando y él, Grover y Kono (que dado su grado de aburrimiento lo agradece en el alma) se ponen a investigar.
Resulta que un pseudomafioso había apostado mucho dinero a la derrota del equipo de Chin y para asegurarse de que eso pasaba había secuestrado al padre del mejor jugador del equipo para que éste jugara mal aposta con la amenaza de matar a su padre si no lo hacía.
Por supuesto que el equipo se encargará de rescatar al padre del chico a tiempo y el podrá jugar a nivel para darle a su equipo la victoria. Eso, ni se dudaba vamos.
El episodio, con todo lo malo que ha sido (porque ha sido malo de narices) me ha resultado entretenido. Es que ha sido todo tan inverosímil, tan cogido por los pelos, tan.. bueno, tan esta serie, que ha resultado super entrañable.
A ver, esta serie nunca ganará un emmy ni le nominarán a ninguno (y que de gracias que los razzies no se otorgan a las series) pero es que mola tanto verla y se lo pasa uno tan bien, que da lo mismo.
Si, los guiones no se sostienen, hay que aplicar el suspension of desbelief cada dos minutos y algunas tramas son cutres de narices, pero es que uno no puede evitar quererlos.
Eso si, por mucho que yo les vea con buenos ojos, la trama de la isla de Steve ha sido una de las cosas más ridículas que ha hecho esta serie ever. En serio, tampoco hay que estirar la cuerda tanto. Un poquito de coherencia de vez en cuando tampoco viene mal.
En la trama secundaria, ha habido momentos un tanto aburridos (a mi cuando Chin se pone demasiado intenso me agota) pero Kono y Grover han molado tanto que lo han compensado.
LO MEJOR: Que la serie tenga tan pocos complejos
LO PEOR: Que haya sido tan malo y tan inverosímil
PUNTUACIÓN: 3/10
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