domingo, 15 de noviembre de 2015
HOMELAND 5X06 PARABIOSIS
(contiene spoilers)
Muy buen episodio de Homeland esta semana en el que vemos que además de ser más borde, Saul ha evolucionado a peor espía tras el salto temporal, Carrie pasa bastante de lo que le haya podido pasar a Quinn y éste hasta medio muerto es capaz de ser muy, muy chungo.
El episodio empieza donde lo dejó el anterior, con Carrie y Saul reuniéndose de forma secreta. Saul es muy, muy borde con Carrie y le dice que le importa un pimiento que quieran matarla que con él no cuente para ayudarla. Previamente Carrie le había pedido a Saul que le pasará los famosos documentos filtrados ya que está segura de que los rusos la quieren muerta porque puede descubrir algo en esos documentos. Lógicamente, Carrie se muestra muy afectada por el comportamiento de Saul y se tiene que ir a buscar ayuda a otra parte, en concreto va a pedirle ayuda a Otto During, que se muestra bastante más comprensivo que Saul y promete conseguirle el avión para huir que Carrie le pide.
Por otro lado, Saul, a pesar de estar muy enfadado con Carrie, de su reunión secreta ha obtenido varias informaciones muy valiosas. Una que los rusos son los que están detrás del atentado al avión, otra que alguien ha descubierto su operación con Quinn y otra que su propia agencia le está siguiendo, algo por lo que va a pedirle explicaciones a Allison que en esta ocasión no miente y le dice que todo es cosa de Dar Adal (bueno si bonita, eso es cierto pero la que ha montado todo el tinglado eres tú).
Es entonces cuando Saul va a enfrentarse con Dar Adal y nos enteramos de que sus relaciones no son todo lo idílicas que parecían ya que treinta años antes, Saul le filtró información al mosad acerca de una de sus operaciones, los israelíes utilizaron la información de forma muy particular y todo el asunto terminó siendo algo muy, muy turbio. De ahí que Dar no se fíe un pelo de Saul, le haya mandado seguir, impida su acceso a los servidores de la CIA y quiera que se someta a un polígrafo.
Visto el panorama, Saul comprende que lo mejor para él es conseguirle la información a Carrie. De ahí que medio hackee uno de los servidores de la CIA (no sabía yo que Saul era tan diestro en temas informáticos), se baje los dichosos documentos (a estas alturas tengo verdadera curiosidad por saber qué es lo que contienen exactamente), se escape de la CIA y se las apañe para hacerle llegar a During los documentos con la promesa de que se los pase sólamente a Carrie. Vaya, parece que Saul no ha perdido todas sus facultades. Eso si, terminará siendo detenido por los Dar minions durante su reunión con During.
En otro orden de cosas, Jonas está bastante harto de las idas de pinza de Carrie y quiere que vaya con él a una comisaría a denunciar lo que está pasando. Carrie se niega y se empeña en conseguir los documentos a toda costa. Jonas, como la audiencia, está un poco harto de los dichosos documentos sobre todo teniendo en cuenta de que Carrie pasa bastante del tema cuando Jonas le dice que Quinn está posiblemente muerto. Vamos, que un hombre ha muerto por salvarla y a ella le da igual (la verdad es que esto no mola nada de nada, pobre Quinn).
Carrie sigue a lo suyo (quiero los documentos, quiero los documentos) y Jonas le da un ultimátum. O se va con él a la policía o su relación está terminada. Como Carrie es una completa obsesa del trabajo y cuando se le mete algo entre ceja y ceja no para hasta conseguirlo, decide seguir con su búsqueda de los documentos, lo que hace que Jonas se harte del todo y la dejé sola en el deprimente escondite de Quinn.
Hablando de Quinn, nos enteramos que el buen samaritano que le encontró cuando se quería suicidar al final del anterior episodio, es médico y le ha salvado la vida. También es un hombre muy majo que vive en un sitio repleto de posibles terroristas a los que el gobierno ha tenido que soltar debido a la filtración de documentos.
Enseguida todo el mundo en el edificio sospecha que Quinn es espía (esto me parece un poco de aquella manera, ni que Quinn tuviera un cártel en la frente que dijera: Soy espía), pero el médico (que nos enteramos de que en realidad es el conserje del edificio y que sólo ejerce de médico para la gente que no puede costeárselo porque es sirio y no le han convalidado su título en Alemania) le protege todo lo que puede y las cosas no llegan a mayores, por lo menos hasta que Quinn está más o menos operativo.
Quinn intenta distraer la atención diciendo que no es espía sino mercenario y que acaba de volver de Siria donde trabajaba para el mejor postor. La cosa más o menos cuela para todo el mundo menos para el radical cabecilla super chungo, que le tiende una emboscada en cuanto Quinn puede levantarse de la cama.
Pero claro, Quinn es Jack Bauer 2.0 y hasta medio muerto es muy, muy bestia y el super chungo termina muriendo durante la refriega (y como no parecía ser muy querido entre sus compañeros, éstos pasan bastante del tema de vengarle). Eso si, antes de morir añade un par de heridas a la colección de Quinn que tiene que volver a ser atendido por el pobre médico.
El episodio me ha gustado mucho. Todas las tramas (la de Carrie, la de Saul, la de Quinn) han sido interesantes y además han aportado bastante información nueva y relevante para la trama. Parece que las cosas por fin avanzan.
Mi favorita ha sido la de Saul, Dar y Allison. El detalle de la desconfianza de Dar hacia Saul por una filtración ocurrida treinta años antes no me la esperaba para nada, como tampoco me esperaba que Saul estuviera tan poco hábil para no darse cuenta de que le estaban siguiendo (la próxima vez que vea a Carrie debería dejar de ser tan borde y agradecerle la información). Espero que todo sea un plan urdido por Dar y Saul para desenmascarar a Allison porque éste les está haciendo quedar bastante mal. Lo de Saul tiene un pase pero Dar es ese espía chungo y molón al que no se le pasa una y esto le hace bajar minipuntos de molonidad.
En otro orden de cosas, Carrie ha vuelto a su forma de ser obsesiva a la que estamos tan acostumbrados. Eso si, para nosotros esta Carrie no es nueva pero para Jonas si y sale corriendo a las primeras de cambio. Totalmente comprensible si tenemos en cuenta que no sólo Carrie está dispuesta a seguir arriesgando su vida sino que parece ser totalmente indiferente a que un amigo haya muerto por su culpa. Esta relación tenía pinta de que iba a acabar pronto. Era imposible que el pobre Jonas pudiera seguir el ritmo a Carrie cuando se mete en conspiraciones varias. De todas formas, no voy a echar demasiado de menos a Jonas si no vuelve a aparecer. Es un personaje que me ha parecido demasiado plano y aburrido.
Eso si, aunque Carrie ha resultado un poco fría e indiferente sobre el estado de Quinn ante Jonas, se ha redimido un poco durante su conversación con Otto During en la que le cuenta de que no ha estado ahí para un amigo suyo que siempre había estado ahí cuando ella le había necesitado.
Por cierto, Otto During me cae muy bien. Luego resultará ser malo, maloso y esas cosas, pero de momento mola.
Otro que mola mil es Quinn, que es lo más duro de esta serie. Hasta medio muerto es un super espía capaz de eliminar a los malos malosos. Me ha caído muy bien el médico que le ha ayudado, lo que significa que lo más probable es que muera en próximos episodios.
En fin, veremos qué pasa en el próximo episodio. A ver si Dar y Saul consiguen descubrir a Allison, Carrie revisa los documentos y Quinn se recupera del todo.
LO MEJOR: La triquiñuela de Saul para dejarle los documentos a During
LO PEOR: Que Saul y Dar no se enteren de nada con respecto a Allison
PUNTUACIÓN: 9.5/10
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