EL MENTALISTA 6X09 MY BLUE HEAVEN

(contiene spoilers)

Después de que el episodio anterior resultara bastante decepcionante para lo que se esperaba de él "El Mentalista" esta semana nos han dado un muy buen episodio que sienta las bases para lo que va a ser el resto de la temporada.

Dirigido por Simon Baker, que en mi opinión debería dirigir más episodios porque siempre que lo hace sus episodios suelen ser realmente buenos (por ejemplo él dirigió uno de mis episodios favoritos de toda la serie "Blinking Red Light"), es un cambio de tono en toda regla a lo que llevamos de temporada. Es un episodio tranquilo, calmado, que nos muestra que ha sido de nuestros protagonistas durante los últimos dos años (tiempo que ha pasado desde el final del 6x08).

El episodio empieza con Lisbon dando una charla en un colegio. Ahora es jefe de policía en un pequeño pueblo y el trabajo, aunque tranquilo y agradable, no parece especialmente excitante.

De vuelta en su oficina, su ayudante entra en su despacho, visiblemente conmocionado, un agente del FBI, Abbott, está allí y quiere verla.

Abbott entra y le pregunta si sabe algo de Jane, si se ha puesto en contacto con ella. Lisbon lo niega, diciendo que no y que no le importa qué sea de él. Acto seguido Abbott le pregunta si Rigbsy y Van Pelt saben algo y ella dice que va a quedar a cenar con ellos pronto, que cuando les vea se lo preguntará. También le pregunta por Cho, pero Lisbon dice que hace tiempo que no sabe nada de él.

Abbott entonces ve una caracola encima de la mesa de Lisbon y le dice que se dice que, a través de una caracola, se puede escuchar el mar del que proviene.

En ese momento el plano cambia y vemos a Jane, con un atuendo bastante peculiar (con una camisa, una especie de pareo y sus horribles zapatos marrones) caminando por una playa. Parece que los dos últimos años los ha pasado en ese pequeño paraíso (al que hace referencia el título del episodio).

Vemos una serie de rituales de Jane en el pueblo, regar las plantas de su pequeño apartamento, prepararse un té y escribir una carta. Entonces empieza un "voiceover" de lo que ha escrito en la carta mientras se le ve ir a la oficina de correos. Es una carta a Lisbon en la que le cuenta algunos de sus rituales diarios. En contra de lo que Lisbon le dice a Abbott, Jane si que ha mantenido contacto con ella, a través de cartas (y por lo que comenta en la oficina de correos y se ve más tarde, la ha debido de escribir con bastante frecuencia).

Las mujeres de la oficina de correos comentan que Jane es un hombre muy educado y cortés, pero que su español es malísimo. Y ahí empezamos a ver el principal problema de Jane, no consigue comunicarse con la gente.

A la salida de la oficina de correos, unos niños locales le piden que les haga un truco de magia. En esa misma escena Jane conoce al traficante de droga local (un hombre bastante desagradable).

Finalmente Jane llega al bar donde desayuna todas las mañanas (te y huevos revueltos, para fastidio del dueño que se pregunta si no sería más fácil que pidiera café para todo el mundo) y saluda al perro del dueño.

En ese momento se da cuenta de que hay una mujer americana y entabla conversación con ella. Se ve que Jane está realmente necesitado de hablar con alguien en su idioma (por lo visto sólo un anciano, Roger, habla inglés en la isla y no es muy comunicador). En esta conversación Jane le dice a la mujer que se infravalora el valor de la comunicación y también le pide el libro que está leyendo (cuando lo termine), ya que es complicado encontrar libros en inglés por esos lugares.

La mujer, Kim, le invita a unirse a ella y empieza a hacerle bastantes preguntas. Van a pasear por la playa, a recoger una camisa del sastre y finalmente Kim le invita a salir esa noche. Previamente le habia preguntado por el anillo (Jane le confiesa que su mujer murió pero que no está preparado para hablar de ella) y si no tenía planes de volver a Estados Unidos.

Esa misma mañana, Abbott y sus hombres llegan a la isla. Jane se entera por el conserje del hotel, Franklin, del que se ha hecho amigo. Jane se presenta ante Abbott y le pregunta qué quiere (con bastante seguridad porque por lo visto las leyes de extradición no aplican allí). Abbott le dice que sus superiores quieren hacer un trato con él. Olvidarán todos los cargos si vuelve a Estados Unidos y trabaja como consultor para ellos. Jane se niega aduciendo que no quiere volver a su antigua vida.

Abbott le dice que si fuera por él, le llevaría esposado y le arrojaría en la cárcel pero sus jefes creen que les puede ser de utilidad y él mismo cree que tiene un don. A pesar de que no está de acuerdo con el trato, Abbott le dice a Jane que es un buen trato y que debería aceptarlo. Jane se vuelve a negar, pero le pregunta a Abbott cómo le han encontrado. "Por las cartas a tu novia Lisbon. Muy ingenioso hacérselas llegar a través de tus amigos del carnaval, pero no lo suficientemente ingenioso" le responde Abbott.

Esa noche Jane, antes de acudir a la cita con Kim se quita el anillo y lo deja en la mesilla de noche.

Mientras Jane cena y sale a bailar con Kim, nos contraponen la imagen de Lisbon cenando con Rigsby y Van Pelt, que ahora tienen una agencia de seguridad informática privada y acaban de tener una niña, Maggie.

Lisbon le pregunta a Ribsby en un momento que Grace sale a hablar por teléfono con la niñera si echa de menos la vida en el CBI. Rigsby, que la vuelve a llamar jefa, le dice que no, que ahora están muy ocupados y no les da tiempo a pensarlo. Lisbon dice que al principio si lo echaba de menos, pero que ahora todo está bien, todo está tranquilo.

Cuando Ribsby y Van Pelt se van, Lisbon saca la caja donde guarda las cartas de Jane (que son unas cuantas) y se pone a releer una, mientras bebe una copa de vino.

Mientras tanto, Jane y Kim se dirigen de vuelta (no se sabe bien si al hotel de ella, a la casa de él o a ninguna de las dos), cuando Kim observa que les siguen y Jane, al ir a ver quien es, recibe una buena paliza por parte de los secuaces del traficante que conoció aquel día por la mañana (por hacer demasiadas preguntas).

Kim le lleva a su casa y le cura como puede, hasta que Jane se duerme. A la mañana siguiente, Jane tiene un momento de pánico al no saber qué ha ocurrido esa noche, al ver a Kim preparando un té (definitivamente aún no está preparado para tener una relación). Kim le dice que le han llamado del trabajo y que debe irse, pero que lo ha pasado bien con él.

Jane, al ir a la cafetería a desayunar, se encuentra con que el traficante que ordenó que le dieran la paliza, ha matado al perro del dueño, simplemente por ladrar.  Kim se pasa por bar antes de irse y le da su número, volviendo a recordarle que siempre puede volver a Estados Unidos.

Después de esto, Jane observa nuevamente a Roger y probablemente el temor a terminar convirtiéndose en él hace que coja la servilleta donde Kim le ha escrito su número y empiece a redactar sus condiciones, llame a Abbott y le diga que acepta el trato pero bajos sus términos. Además quiere a Lisbon con él en todo momento, si ella no está o le dice que a estar y no lo está, le dirá a sus jefes que trabajará para cualquier agente salvo para él.

Antes de irse, Jane prepara uno de sus trucos para que el FBI detenga al traficante y a sus compradores.

Cuando ya se van a marchar, Jane le hace firmar a Abbott sus condiciones por quintuplicado. Dándole a él las copias y quedándose él con el original. Además, Franklyn, el botones amigo suyo del hotel le dice algo antes de irse.

Por fin llegan a la sede del FBI en Austin, Texas, donde Jane se encuentra con Cho que ahora es agente del FBI. Toda la escena es graciosísima, desde Jane intentando darle un abrazo a Cho, quedándose a medio camino, a la pregunta de Jane de si le han puesto algún tipo de chip y la respuesta de Cho, "no, que yo sepa".

Cho le indica que vaya a un despacho y cuando Jane se da la vuelta, vemos una media sonrisa de Cho.

Al abrir la puerta, Jane se encuentra con Lisbon, que está de espaldas y todavía no le ha visto. A Jane se le ilumina absolutamente la cara al verla. Cuando ella se da cuenta de que es él se levanta y le dice, "bonita barba", Jane le responde que gracias y ella a su vez le da las gracias por las cartas. Jane la abraza y le dice que la ha echado de menos y ella le dice que también le ha echado de menos (toda la escena es totalmente adorable). Lisbon le pregunta que hace allí y él le dice que espere, que va a ser genial.

Abbott entra en la habitación y rompe el momento. Le vuelve a ofrecer el trato y Jane le vuelve a hablar de sus términos, el primero de los cuales es que Lisbon trabaje con él. Lisbon le dice que ya tiene un trabajo, pero Jane le dice que luego hablan (Jane nunca cambiará, desparece durante dos años y espera que Lisbon deje todo para hacer lo que él quiere, aunque en este caso, lo haga por el bien de ella).

Abbott le dice que de sus términos ni hablar. En ese momento, entra la agente Fisher, que nos es otra que Kim, la mujer de la isla. Jane se muestra muy sorprendido (espero que sea un truco porque se veia a la legua que Kim no era trigo limpio, si Jane no se ha dado cuenta, es que está más oxidado de lo que realmente parecía). Lisbon pregunta quién es Kim un par de veces con muestras evidentes de enfado (Lisbon celosa en 3..2..1).

Abbott le dice a la agente Fisher que prepare la celda de detención que Jane no acepta el trato. Lisbon se queda bastante perpleja, pero Jane le dice que tiene todo bajo control y ahí acaba el episodio.

Me ha gustado mucho el episodio.  Vuelvo a repetir que a Simon Baker se le da realmente bien dirigir y debería hacerlo más a menudo. Será porque por fin ha habido un tono diferente en la serie, que ya se echaba de menos.

Simon Baker ha vuelto a estar estupendo interpretando al Jane triste y solitario, con problemas para comunicarse, pero que no deja de ser amable con todo el mundo (son episodios como este los que hacen olvidar los oscuro que es Jane), que quiere olvidar su nueva vida, pero no deja de escribirle cartas a Lisbon contándole su dia a día.

Me ha dado mucha pena que haya caido en la trampa de Kim (salvo que el próximo episodio demuestre lo contrario) porque ha sido bastante bastante obvia. Pero teniendo en cuenta lo solitario y necesitado de compañía que estaba Jane tampoco me parece descartable.

No me ha caído bien el nuevo personaje, Kim. Ha entrado en la serie mintiendo y engañando y ese tipo de personajes no me gustan salvo que destilen carisma (y este no parece ser el caso, de hecho aunque le voy a dar el beneficio de algún episodio más parece muy sosa). Puede resultar interesante, pero como quieran meterla en un triángulo con Jane y Lisbon me va a empezar a caer bastante peor. Primero porque aunque Jane tiene tendencia a sentirse atraído por las chicas malas (lorelai, erica), a estas alturas de la película ya han hecho eso dos veces y puede resultar repetitivo (además que estoy un poco harta de que sea siempre Lisbon la sufridora en esta historia) y si es verdad que esta es la última temporada de la serie, no quiero verles perder el tiempo con triángulos absurdos.

Si tienen intención de que Jane y Lisbon terminen juntos, bastantes problemas tienen ya para alargar la historia, Jane y su incapacidad para quitarse el anillo, como hemos visto en este episodio, Lisbon y su desconfianza de serie unida a todas las que le ha hecho Jane a lo largo del tiempo que se conocen ( incluido el momento dejarla tirada en la  playa del 6x06).

Las interacciones entre Lisbon y Jane han sido tremendamente adorables, tanto el encuentro, como todo el asunto de las cartas (que vista la caja de Lisbon han debido ser unas cuantas). Yo creo que no he visto sonreir a Jane más sinceramente en todo lo que llevamos de serie como en la escena en la que vuelve a ver a Lisbon.

El momento de Lisbon leyendo las cartas junto al fuego también ha sido muy bonito. El asunto de las cartas aparte de las connotaciones románticas que se le quieran dar, me ha gustado porque ha sido una forma de demostrar que a pesar de salir huyendo cuando mató a John el Rojo, no ha olvidado a Lisbon y no ha podido evitar contactar con ella, aunque ello haya derivado en su captura del FBI. No ha sido tan desagradecido después de todo (me pareció fatal que en el anterior episodio saliera corriendo dejando a todo el equipo a que se enfrentara a las consecuencias de sus actos).

Me ha dado pena que Lisbon dijera que había perdido el contacto con Cho y me ha gustado ver que los Rigsby y Lisbon siguen en contacto activamente.

Abbott me ha caído mejor que Kim (y sobre todo el actor parece tener carisma) y si empieza a perder un poco del tono borde, pero mantiene el suficiente para controlar a Jane, creo que puede dar mucho juego y ser un personaje interesante. De momento me han gustado sus interacciones con Jane y Lisbon.

Cho sólo ha salido en una escena, pero ha sido de lo mejor del episodio. Queremos más Cho.

Desde el punto de vista puramente superfical este ha sido el episodio de la serie en que más guapos he visto a Simon Baker y a Robin Tunney (el pelo de ésta en especial le sentaba realmente bien).

LO MEJOR: Simon Baker, el encuentro Lisbon-Jane, el cambio de tono de la serie que ya hacía falta

LO PEOR: No me gusta nada el personaje de Kim Fisher. No se muy bien qué puede aportar

PUNTUACIÓN: 9/10