(contiene spoilers)
La tercera temporada de "The Walking dead" consta de tres episodios más que la anterior (16) que a todos los efectos funcionan como dos minitemporadas de ocho episodios.
Esta vez, cambiamos de escenario y en lugar de la granja, en la que nuestros protagonistas pasaron la mayor parte de la segunda temporada, la acción principal se desarrolla en una prisión (y en un pueblo llamada Woodbury en el caso de los antagonistas).
En esta temporada contamos con la aparición del primer villano humano (si no contamos a Shane, al que al final también podíamos considerar como tal) en la serie, "El gobernador" (interpretado por el británico David Morissey). El gobernador es mucho más peligroso que cualquier zombi ya que, una apariciencia aparentemente normal oculta a un auténtico desequilibrado sanguinario (no queda claro si siempre fue así o el apolcalipsis zombi y la pérdida de su mujer y su hija desataron la locura).
A la presencia del gobernador se le une que Rick no se encuentra en su mejor momento. Buscando un lugar seguro para que Lori tenga a su bebé, se refugian en una cárcel, que aparentemente limpian de zombis nada más llegar (por lo menos una parte).
Evidentemente todo no podía ser tan fácil y en medio de un ataque de zombis con los que no contaban, Lori se pone de parto, que por si fuera poco, es problemático y a Maggie no le queda más remedio que practicarle una cesárea rudimentaria a Lori (a petición de ésta) para salvar al bebé (que es una niña). Lori muere desangrada y es Carl el que tiene que rematar a su madre antes de que ésta se transforme.
Además, Hershell ha perdido un pie en un ataque anterior tras ser mordido por un zombi. Rick consiguió evitar que se transformara cortándole la parte baja de la pierna, pero ahora Hershell sólo puede desplazarse con muletas.
Tras la muerte de Lori, Rick empieza a ver visiones y se desentiende de su puesto de líder del grupo, cargo que pasa de forma oficiosa a Daryl y Hershel.
Glenn y Maggie se acercan a un pueblo para buscar leche para la niña y allí se encuentran con Merle, el hermano de Daryl, que decide secuestrarlos por propia iniciativa para que le digan donde está su hermano y llevarlos a Woodbury, un pueblo en el que la gente vive en aparente tranquilidad y que está dirigido por un hombre que se hace llamar "El Gobernador".
A este mismo pueblo ha llegado Andrea junto con Michonne, la mujer que la rescató cuando se quedó rezagada del grupo en el último ataque zombi a la granja de Hershel. Michone no se fia para nada del gobernador y le pide a Andrea que se vayan. Esta no la hace caso y a Michone no le queda más remedio que partir sola, con Merle tras sus pasos para matarla por orden del gobernador.
Durante esta persecución es cuando Merle se encuentra con Maggie y Glenn y decide llevárselos.
Michonne va a la prisión y avisa a Rick y al resto de lo que ha pasado y les lleva hasta el pueblo del gobernador para que puedan rescatar a Glenn y Maggie.
Durante el rescate, Michonne mata a la hija del gobernador a la que éste tiene oculta y encadenada a la espera de una cura ya que se ha transformado en zombi. Además, durante la lucha, Michonne le clava un cristal en el ojo al gobernador, haciendo que lo pierda. Ni que decir tiene que ninguna de las dos cosas le hacen demasiada gracia a un tipo tan "equilibrado" como el gobernador".
Este secuestro y posterior rescate desata las hostilidades entre ambos grupos, que pasan el resto de la temporada con escaramuzas varias.
Al final, Rick deja de emular al niño del sexto sentido, recobra la cordura y se pone de nuevo a dirigir al grupo.
Después de una primera confrontación que parecia preceder a la batalla final, al gobernador se le va la cabeza más de lo normal, mata a todos sus hombres salvo a dos y se va del pueblo.
Eso si, antes se ha encargado de dejar a Andrea encerrada con un herido que se convertiría en zombi lo que da como resultado que Andrea es mordida y Rick, Michonne y Daryl sólo llegan a tiempo para que Michonne acompañe a Andrea en sus últimos momentos.
La huída del gobernador hace que Rick decida acoger a todos los supervivientes de Woodbury en su grupo. Conclusión: más gente para que pueda ser devorada la próxima temporada.
Recuento de bajas de esta temporada: Lori y Andrea, que seamos claros, serian probablemente los dos personajes que la gente hubiera seleccionado para que murieran al comenzar la temporada.
La temporada me ha gustado y me ha vuelto a parecer interesante el concepto de deshumanización del ser humano. El hecho de que los principales peligros de los humanos supervivientes sean el resto de humanos supervivientes y que se haya perdido la capacidad de ayudar al prójimo (la escena de Rick ignorando por dos veces la petición del chico que hacía autostop y que al final se terminan encontrando devorado por los zombis) me han parecido unas tramas muy brillantes. Mucho más original que ceñirse sólo a los zombis atacan, se comen a un par de personajes hasta que vuelven a atacar y se comen a otro par de personajes.
Sin embargo, el final me ha parecido totalmente anticlimático, justo lo contrario que la temporada pasada que terminó de forma espectacular. El hecho de que al gobernador le haya dado el ataque de locura y haya decidido huir me ha dejado con un mal sabor de boca. Evidentemente, esto lo están alargando para que el gobernador reaparezca y provoque el caos la próxima temporada, pero no me ha gustado demasiado la forma en que han cerrado la temporada.
El ritmo de la serie, como siempre, bastante lento, sobre todo en los primeros dos o tres episodios de cada tramo de la temporada.
Andrew Lincoln ha estado espectacular esta temporada, mucho mejor que en las dos anteriores, donde ya estaba bien. Rick es un líder bastante desastroso y los planes le suelen salir fatal, pero sigues empatizando lo suficiente con él para esperar que en algún momento las cosas le salgan bien. No me ha gustado demasiado todo el asunto de Rick viendo fantasmas, pero hay que reconocer que le ha dado a Andrew Lincoln la oportunidad de lucirse, lo que siempre es de agradecer.
También me han gustado mucho Norman Reedus y Scott Wilson. Hershell es un encanto de personaje y Daryl ha sido posiblemente el personaje que más ha evolucionado desde que empezó la serie (¿quién hubiera dicho que el borde desconfiado del principio terminaría siendo la mano derecha de Rick y le pondría motes a su hija?). La escena de Daryl con el bebé de Rick es simplemente adorable.
Me ha gustado Michonne como nueva incorporación. Me parece un personaje interesante y que puede dar bastante juego.
David Morissey ha hecho un buen trabajo interpretando al psicópata del gobernador pero tengo que decir que a última hora me estaba empezando a resultar cargante. Evidentemente va a volver (esa huída final ha parecido cualquier cosa menos definitiva),
En cuanto al resto de personajes, Glenn ha estado especialmente cargante esta temporada. Si se le comen los zombis próximamente no me va a dar ninguna pena. Carol, Beth y Maggie me siguen gustando bastante, cada una en su estilo, aunque Carol se está volviendo cada vez más siniestra.
Me sigue resultando tremendamente curioso que en una serie americana, ambientada en el sur de Estados Unidos tanto el protagonista como el principal antagonista sean inglesas.
En resumen, la temporada me ha gustado más que la anterior, pero el final me ha parecido peor.
LO MEJOR: Andrew Lincoln, el concepto de que el principal enemigo del hombre es el propio hombre
LO PEOR: El final me ha resultado muy anticlimático
PUNTUACIÓN: 8.5/10
Efectivamente en esta serie los zombies son una excusa. El tema es un grupo de personas es una situación límite. A mí cada vez me gusta más. La 4a temporada me pareció más entretenida/satisfactoria que ésta, que se hace un poco pesada. Daryl rulez! :P
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