martes, 24 de diciembre de 2013

PERSON OF INTEREST 3X11 LETHE


(contiene spoilers)

Buen episodio, aunque un tanto extraño de Person of interest para despedirse antes del parón navideño. Eso si, al lado de los  tres episodios anteriores, se ha quedado en poca cosa.

El episodio sigue en parte tratando con las repercusiones de la muerte de Carter. Reese, en cuanto ha podido levantarse de la cama ha desaparecido y nadie sabe dónde está ( aunque los espectadores si que sabemos que ha ido a Colorado donde está ahogando las penas en un bar).

Finch duda en responder las llamadas de la máquina, de hecho está haciendo un gran trabajo ignorándolas hasta que Root le dice que hay gente a la que tienen que ayudar y que debe dejar de ignorarla. Acto seguido, le pasa un código que la máquina le ha hecho llegar de alguna manera (no nos dicen como ni Finch le pregunta en profundidad tampoco, simplemente coge el número y lo mete en la base de datos).

El número pertenece a Arthur Claypool (Saul Rubinek), un analista gubernamental que está siendo tratado de cáncer (en concreto, de un tumor cerebral) en el hospital. Al ver la identidad del número, Finch se queda un poco perplejo, por lo que Shaw le pregunta si Arthur le es familiar, a lo que Finch responde que no.

Finch envía a Shaw al hospital (donde se hace pasar por médico), para acercarse a Arthur y averiguar un poco más acerca de él y del motivo por el cual la máquina les ha proporcionado su número. Pronto descubren que el caso es más complicado de lo que parecía, ya que tres hombres del servicio secreto escoltan a Arthur en todo momento.

Resulta que Arthur no es un simple analista gubernamental sino que tenía un importante cargo en un proyecto de investigación llamado Samaritan del departamento de estado. El tumor le hace divulgar indiscriminadamente información confidencial, por lo que los agentes del servicio secreto están en todo momento con él para que no cuente nada clasificado a nadie.

En el hospital también vemos a Diane (Camryn Manheim), la esposa de Arthur, a la que éste insiste no conocer, aunque todos le achacan el olvido al tumor cerebral.

Shaw consigue abortar un intento de sonsacar información a Arthur pero esto da lugar a su detención por parte de los agentes del servicio secreto. Sin embargo, más gente está detrás de Arthur y mientras interroga a Shaw el agente del servicio secreto se desploma tras haber ingerido algo de comida que le acaban de traer.

Al informar a Finch (que está en el parking del hospital) de lo sucedido, éste ve como el grupo revolucionario Vigilance accede al hospital con intención de secuestrar a Arthur, algo de lo que informa a Shaw para que saque a Arthur del hospital.

Es entonces cuando ante la negativa de Arthur de seguir a Shaw, Finch se presenta ante ellos. Resulta que Finch si que conocía a Arthur, ya que ambos habían sido compañeros de estudios en el MIT. Al ver a Harold, es cuando Arthur accede a seguir a Shaw. Finalmente Arthur, Diane, Finch y Shaw consiguen escapar de Vigilance.

Una vez fuera del hospital y a salvo en un hotel, Arthur le cuenta a Finch acerca de Samaritan, que era básicamente lo mismo que la máquina de Finch, pero con la posibilidad de evolucionar ante el entorno (algo que la máquina de Harold ha terminado haciendo de todas formas). Sin embargo, el proyecto de Arthur fue cancelado por falta de fondos antes de que Arthur pudiera terminarlo (justo en la fecha en la que la máquina de Finch comenzó a estar operativa).

En el hotel, Arthur sigue insistiendo que no conoce a Diane. Finch le dice que es normal, que el tumor cerebral le hace olvidar cosas. Arthur le dice que no ha olvidado a Diane, que Diane murió hace dos años y que esa no es su mujer.

En ese momento, la falsa Diane se descubre y entran unos cuantos hombres, entre ellos el antiguo jefe de Shaw para apresar a Finch, Shaw y Arthur.

La falsa Diane resulta ser la jefa del grupo de inteligencia del gobierno para el que trabajaba Shaw, conocida como "Madam". Y han conseguido de un plumazo no sólo atrapar a Arthur sino también descubrir a Finch, al que seguían la pista desde hacía tiempo.

Las cosas no pintan bien para Finch y Shaw, ya que Root está encerrada en la biblioteca y Reese y Fusco se encuentran en Colorado (Fusco ha ido a buscar a Reese al que ha intentado hacer entrar en razón primero hablando y luego, a base de puñetazos). Habrá que ver como consiguen escapar de Madam y sus hombres.

Los flashbacks del episodio se han centrado en la infancia de Harold y en la relación con su padre, que enfermó de alzheimer siendo esto la inspiración de Harold para crear una máquina con recuerdos.

El episodio ha estado bien, pero ha sido muy raro. Reese ha aparecido como 5 minutos en todo el episodio y Fusco incluso menos. Sólo han tenido presencia en el episodio Finch y Shaw.

El personaje de Shaw va mejorando en cada episodio, aún así dudo que entre ella y Root sean capaces de cubrir el hueco dejado por Carter.

A un episodio en el que Jim Caviezel sale cinco minutos siempre va a faltarle algo, por mucho que Shaw domine el arte de derribar a cuantos más malos mejor. De igual forma, he echado de menos más participación de Kevin Chapman, su Fusco ha sido uno de los grandes protagonistas de este último arco y espero que no vuelva a su cuota de cinco minutos por episodio y ya.

Lo interesante de este episodio es que se sientan las bases para los conflictos de aquí al final de la temporada. ¿La máquina de Arthur, Samaritan está activa como parece creer Madam? ¿Qué es lo que pretenden Madam y sus hombres? ¿Qué papel jugará Vigilance ante todo esto? Y sobre todo, ¿en qué posición deja todo esto a Finch y compañía y como encaja Root en todo esto?

La trama de HR ha concluido pero nos quedan unos cuantos más puntos abiertos... y además siempre nos quedará Elias

LO MEJOR: Sentar las bases para el resto de la temporada

LO PEOR: Jim Caviezel no ha salido prácticamente nada

PUNTUACIÓN: 9/10

No hay comentarios:

Publicar un comentario