(contiene spoilers)
Otro muy buen episodio con título informático de Person of interest en el que tenemos a Control (Camryn Manheim) como protagonista del mismo.
El episodio empieza con Control dejando a su hija Julia en el colegio. A partir de aquí, veremos cómo realiza Control su trabajo de eliminar a los números "relevantes" que le proporciona Samaritan.
En esta ocasión, la misión consiste en eliminar a cuatro miembros de lo que se ha identificado como una célula terrorista que pretende atentar en Detroit.
Sin embargo, enseguida nos damos cuenta de que Control y el equipo de Samaritan no confían el uno en el otro, sobre todo cuando vemos que es el senador Garrison el que tiene que intervenir para que Samaritan siga trabajando para el gobierno una vez que éstos se niegan a continuar cuando Control les reclama que le dejen conocer lo que hay en el disco duro del único sospechoso que no ha sido eliminado en la operación que el equipo de Control ha llevado a cabo en la casa donde vivía la supuesta célula.
Esto hace sospechar a Control que hay algo raro en toda la situación por lo que le pide al agente Grice, en una misión independiente, que antes de eliminar al sospechoso se apodere de lo que hay en el disco duro.
Pero cuando Grice va a copiar el disco del sospechoso, el ordenador misteriosamente se incendia y además el sospechoso, Yasim, consigue huir.
Paralelamente, Control y su equipo reciben informes de un par de vigilantes (hombre y mujer) que han entrado en la sede de la bolsa buscando algo (la audiencia reconoce enseguida que se trata de Reese y Root que están intentando encontrar a Shaw).
Control averigua que Yasim está en Detroit, por lo que se dirige con un equipo allí, sólo para ver cómo Yasim se vuelve a escapar toda vez que Root y Reese aparecen con un lanza cohetes (muy discretos ellos) para hacer volar el coche de Control justo cuando ésta y su gente iban a apresar a Yasim.
Root y Reese se llevan a Control para interrogarla por el paradero de Shaw, aunque no parece que Control esté al corriente con la operación. Algo de lo que enseguida se da cuenta Finch cuando entra a hablar con ella tras evitar que Root utilice un tasser de la forma tan creativa a la que nos tiene acostumbrados (Root está muy, muy enfadada con la desaparición de Shaw). Por cierto, que de aquí sacamos en claro que Finch, al contrario que Reese y Root que todavía tienen esperanzas de encontrarla viva, piensa que Shaw está muerta.
Sin embargo, en realidad el secuestro de Control se trata de un señuelo. Finch ha averiguado que uno de los miembros del equipo de Control es un agente de Samaritan. El equipo quiere identificarle y utilizar su teléfono móvil para buscar entre los mensajes enviados por Samaritan alguno que pueda indicarles el paradero de Shaw.
Mientras Finch busca al agente de Samaritan, Reese y Root se dedican a pegarse de tortas con los miembros del equipo de Control (vamos, como casi siempre). Reese y Grice se atizan bastante hasta que Reese le identifica como el agente que Shaw le dijo que le había permitido escapar.
Una vez liberada, Control termina localizando a Yasim en Canadá y pese a que este le cuenta que el y sus amigos no eran terroristas sino ingenieros informáticos reclutados para desarrollar un código que justo habian entregado el día anterior a que Samaritan les identificara como objetivos, Control termina matándole. Pero teniendo en cuenta cómo actúa Samaritan, para mi que Yasim estaba diciendo la verdad.
Algo de esto debe pensar Control que va al edificio de la Bolsa en el que el equipo Máquina le había dicho que habían herido a Shaw y comprueba que en el lugar se habían realizado obras (al menos se había pintado) recientemente. Desde luego, esto no creo que disminuya la paranoia de Control acerca de que hay cosas que Samaritan decide omitir.
Por otro lado, volvemos a ver al niño super siniestro al que utiliza Samaritan como interlocutor (vamos el equivalente a Root con la máquina). En concreto, le vemos en la Casa Blanca, donde tiene un par de encuentros bastante extraños con Mike, el jefe de gabinete del presidente (Michael Gaston, el Bertram del Mentalista y actor que aparece como invitado en mil millones de series al año). El niño insiste en ver al presidente, algo que Mike se toma a broma hasta comprobar que la Bolsa había terminado en las cifras que el niño le había dicho que lo haría. El niño no es más siniestro porque no quiere.
El episodio me ha gustado mucho. No ha sido tan bueno como el anterior pero ha tenido un nivel excelente, sobre todo teniendo en cuenta que el peso del episodio lo ha llevado un personaje no protagonista y que aparece sólo en unos cuantos episodios al año. Pero, Camryn Manheim es tremenda y Control un personaje muy, muy chulo.
Me ha parecido muy coherente tanto que intentara investigar qué le estaban ocultando como que matara al pobre Yasim, a pesar de que lo que le estaba contando parecía tener bastante sentido y podía encajar perfectamente con la estrategia de oscurantismo que está llevando a cabo Samaritan y de la que acababa de darse cuenta. Sin embargo, no se ha dejado arrastrar por sus sospechas y ha eliminado a alguien que podía ser un terrorista potencial. El deber ante todo.
Por otro lado, a pesar de un menor tiempo en pantalla, Finch ha estado estupendo como siempre y los puntazos de Fusco siguen siendo de lo mejorcito de cada episodio.
El duo Reese/Root me resulta interesante, aunque estoy con Finch y creo que la pobre Shaw en principio está muerta, aunque con esta serie nunca se sabe, por lo que todavía les doy una pequeña posibilidad de encontrarla, eso si, pueden hacer implosionar el mundo en el proceso con lo brutitos que son ambos.
El niño de Samaritan es siniestro no, lo siguiente. Que yuyu da.
En fin, veremos cómo continua la trama pero miedo me dan Reese y Root desatados sin la supervisión directa de Finch
LO MEJOR: Camryn Manheim, Control es bastante ama aunque resulte tan antipática
LO PEOR: Que el equipo haya salido tan poco
PUNTUACIÓN: 9/10
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