NEW GIRL 5X19 DRESS

(contiene spoilers)

Muy buen episodio de "New Girl", en el que hemos tenido tres tramas paralelas, a Schmidt y Jess  haciendo de las suyas y a Ally y Winston intentando esconder su relación al resto de la comisaría.

En este episodio no ha habido ni rastro de Sam pero si que hemos tenido una trama girando alrededor de Regan (aunque ella no estuviera presente), lo que me hace sospechar que pronto tendremos a Megan Fox de vuelta en la serie.

En el episodio tenemos por un lado a Jess intentando terminar el vestido de novia de Cece sin mucho éxito. Además, con la presión añadida de que Cece no para de pedirle que se lo enseñe y Jess le da largas como puede.

Eso si, entretanto Schmidt se enterará de que Jess no tiene listo el vestido y ante las quejas de ésta sobre que en el apartamento, con Cece presionándola, no puede concentrarse para terminarlo, la lleva a su oficina, en concreto al cuarto de baño para hombres (en el edificio solo hay 2 y Schmidt paga al otro chico para que no use el baño), lugar en el que ha montado el centro de operaciones de preparativos para la boda. Según Schmidt, allí podrá concentrarse sin problemas para terminar el vestido.

Una vez deja a Jess allí, Schmidt es llamado por su jefa a su despacho. Resulta que Schmidt ha cometido un error impropio de él: ha copiado a su jefa en todos los correos relacionados con la boda al confundir su nombre con el de una de las personas a las que se dirigía.

Lógicamente, esto enfada mucho a su jefa (principalmente porque Schmidt ha pasado de hacer su trabajo para organizar su boda en horario de oficina) que le dice a Schmidt que al próximo error que cometa, se va a la calle.

Es por esto que, en cuanto sale del despacho de su jefa, Schmidt va corriendo al baño de chicos para sacar a Jess del edificio, con la mala suerte de que no la encuentra allí ya que se ha ido a dar uno de sus paseos creativos.

Después de buscarla un rato, Schmidt la encontrará sentada en el hall leyendo una revista pero, cuando intenta sacarla del edificio sin ser vista, la mala fortuna hará que su jefa pase por el hall justo en ese momento y se extrañe de que allí haya una persona desconocida.

Schmidt saldrá del paso diciendo que es la nueva becaria, algo que a su jefa le vendrá muy bien porque utilizará a Jess para hacer sus recados, incluido el recoger a sus muy maleducados hijos.

Pero, como era de esperar, la jefa de Schmidt se terminará enterando de todo y el pobre acaba de patitas en la calle.

Sin embargo, finalmente Jess logrará salvar su empleo (bueno, al menos uno, porque Jess le dice a Schmidt que no le van a dar su antiguo trabajo), después de enterarse de que la jefa de Schmidt lleva intentando que admitan a sus hijos en el colegio donde ella trabaja sin lograrlo (parece que los niños además de ser maleducados, tienen tendencias vampíricas y les da por morder a otros niños) y prometerle que admitirán a sus hijos (compadezco a los pobres niños que tengan de compañeros a semejantes monstruitos).

Por cierto que después de todo el follón, Jess y Schmidt están como al principio, compuestos y sin vestido, aunque al final la cosa se solucionará cuando al doblar el vestido, Jess se de cuenta de que si le da vuelta, en lugar del vestido horroroso que tenía hasta ahora, por arte de magia éste se ha convertido en un vestido precioso. Parece que Cece va a tener un vestido bonito después de todo.

En otro orden de cosas, Nick quiere pedirle a Regan que sea su acompañante a la boda pero no se atreve a hacerlo directamente y le pide a Cece que le escriba en su nombre, algo a lo que ésta se niega en un principio pero que terminará haciendo ya que Nick puede llegar a ser muy persuasivo.

Sin embargo, Regan no dará señales de vida, lo que hará que Nick pase a su plan b (que es un plan muy Nick Miller, las cosas como son) y que consiste en utilizar un teléfono de prepago para escribirle para ver si le contesta, algo que hará a los dos segundos, dejando a Nick y Cece muy sorprendidos.

Como Nick es Nick, en lugar de hacer lo lógicos, esto es, escribirle él directamente con su teléfono, se comprará un montón de teléfonos de prepago más, con los que volverá a escribir a Regan, aunque ésta vez sin obtener respuesta.

Finalmente, Cece consigue convencerle para que le escriba él mismo y directamente le pida que vaya con él a la boda y ésta vez Regan si responde, aunque la respuesta deja bastante desinflado a Nick. Regan no puede ir a la boda (aunque le gustaría) porque tiene que trabajar.

Por cierto, gracias al mensaje también nos enteramos de que Regan sabía desde el principio que el que le estaba escribiendo desde los teléfonos de prepago era Nick.

Por otro lado, Winston y Ally intentan esconder su relación al resto de la comisaría ya que si alguien se enterara, automáticamente tendrían que dejar de ser compañeros.

Sin embargo, ahora que están juntos, ni Ally ni Winston saben muy bien cómo comportarse el uno con el otro delante del resto de policías. De hecho, a Winston empiezan a molestarle cosas que Ally hacía antes de que empezaran a salir, como gastar bromas a su costa.

Pero todo su plan se vendrá abajo cuando uno de sus compañeros (en teoría el más "majo"), les sorprenda besándose en un almacén y les pide una cantidad desorbitada de dinero para que les guarde el secreto (el hombre es adicto al juego y tiene unas deudas considerables que pagar).

Esto hará que Ally y Winston vayan a hablar con su capitán para confesarle que están juntos y que éste, después de unos comentarios hacia Winston muy poco apropiados, les diga que tienen que dejar de ser compañeros y que además uno de ellos va a tener que hacer equipo con el policía chantajista (al que intentan desenmascarar pero su capitán no les cree porque alguien tan "majo" no ha podido hacer eso).

Finalmente, será Winston quien se ofrezca a ser compañero del chantajista aunque a cambio Ally tendrá que cantarle a Wisnton una canción en la comisaría (eso si, en voz baja).

El episodio me ha gustado mucho, aunque la subtrama de Regan y su presumible vuelta me dan casi tanta pereza como las tramas de Jess y Sam.

Los guionistas deberían de darse cuenta de que si meten personajes que les quiten tiempo por episodio a los regulares de la serie, dichos personajes deberían molar (como por ejemplo Ally, a la que me gustaría ver como personaje regular desde ya) y no ser sosos, aburridos y estorbar más que otra cosa, como es el caso de Regan y Sam.

Volviendo a lo bueno del episodio, que ha habido mucho, me ha encantado la trama de Jess y Schmidt (como casi siempre que comparten trama). Me han parecido monísimos ambos (y Cece también, todo emocionada con el vestido porque además de ser su vestido de novia, se lo iba a hacer Jess).

Me alegro mucho de que al final todo haya salido bien y Cece tenga su vestido de novia precioso hecho por Jess y Schmdit no haya perdido su trabajo (aunque a saber qué puesto le han dado visto el comentario que ha hecho Jess acerca de que no le devolvían su antiguo trabajo).

La trama de Nick y Cece me ha gustado como trama aislada (lo de la voz especial de Nick para convencer a la gente me ha hecho mucha gracia) pero no con la finalidad con la que la han metido en el episodio que es preparar la vuelta de Regan.

Por otro lado, Ally y Winston me han parecido monísimos y su trama "realista" dentro de lo "realista" que puede ser esta serie. Lo de su compañero el majo siendo adicto al juego y haciéndoles chantaje no me lo esperaba (como tampoco me esperaba que el capitán le medio tirara los trastos a Winston). Eso si, me da pena que ya no puedan ser compañeros porque molaban mil juntos de patrulla.

En fin, en los episodios que quedan, veremos qué pasa al final con Regan/Nick y  Sam/Jess, cómo llevan Ally y Winston el no ser compañeros y sobre todo, cómo termina siendo la boda de Schmidt y Cece (ahora mismo lo que más me apetece ver de lo que queda por delante).

LO MEJOR: Todo menos la presumible vuelta de Regan

LO PEOR: Que parece que Regan va a volver y a Sam todavía le tenemos por ahí aunque lleve unos episodios sin aparecer

PUNTUACIÓN: 9.5/10