GAME OF THRONES 5X06 UNBOWED, UNBENT, UNBROKEN

(contiene spoilers)

Buen episodio de Game of Thrones, con el final más impactante de lo que llevamos de temporada. Si creía que era imposible tenerle más manía a Ramsay Bolton, hoy los guionistas me han demostrado que, efectivamente se puede. No veo la hora en que a los Bolton en general y a Ramsay en particular le den su merecido. Pobre Sansa.

En otro orden de cosas, Tyrion y Jorah molan, Cersei es muy, muy tonta (vaya, menuda novedad) y no entiendo por qué pierden el tiempo con la trama de Dorne por mucho que me gusten Jaime y Bronn.

En este episodio les ha tocado descanso la lady dragón, a Jon Nieve y los suyos (se les ha echado de menos) y a Brienne y Pod (aunque para lo que están haciendo últimamente..).

El episodio empieza con Arya en Braavos. Sigue con su ritual de aprendizaje en la Casa de Negro y Blanco para convertirse en un hombre sin rostro. Pero no parece que el ritmo que está siguiendo sea muy de su agrado y se queja ante Jaaquen de que quiere ir más deprisa. Jaaquen en un principio no le hace mucho caso y le dice que siga a lo suyo (esto es limpiando los cuerpos de los muertos que van llegando a la casa). Sin embargo, finalmente Jaaquen terminará acelerando la preparación de Arya ya que, aunque todavía no está preparada para ser un hombre sin rostro, ya lo está para cambiar de rostro.

Por otro lado, seguimos con la road movie, Tyrion y Jorah de camino a Meeren. Como de costumbre, Tyrion no para de hablar y de hablar, ante la exasperación de un Jorah que sabemos que es parco en palabras.

Sin embargo, durante sus escenas salen unos temas de conversación muy interesantes como por ejemplo que Tyrion informa a Jorah de que su padre ha fallecido, algo que Jorah no sabía o las dudas de Tyrion acerca de que Daenerys sea la reina adecuada para Poniente considerando sus antecedentes familiares y que no ha vivido nunca allí (y esto sin conocer a Danny en persona y comprobar in situ sus idas de olla). Gracias Tyrion por ser la voz del espectador y plantear nuestras dudas existenciales.

Pero Jorah medio le convencerá contándole cómo Daenerys se metió en un fuego y en lugar de quemarse viva, salió andando, sin un rasguño y con tres monísimos dragoncitos bebé en sus brazos. Ya sabemos que los dragones son la debilidad de Tyrion por lo que de momento Jorah ha ganado la primera batalla.

Mientras están enfrascados en estas conversaciones tan interesantes nuestro duo dinámico no se ha dado cuenta de que unos tratantes de esclavos con muy malas intenciones les estaban rodeando.

La intención de los tratantes de esclavos es llevarse a Jorah para venderlo en una ciudad situada en dirección opuesta a Meeren y matar a Tyrion para cortarle su pene y vendérselo a quien le ofreciera más dinero. Por lo visto se cree que los penes de los enanos poseen propiedades mágicas y se obtiene mucho dinero de su venta.

Sin embargo, Tyrion sacará a pasear su ingenio y primero evitará que le maten a él aduciendo que si le llevan a alguien su pene no podrían asegurar que se trate del pene de un enano. Es mejor que se lleven al enano entero para que el comprador pueda comprobar la mercancia.

Además, Tyrion se las apaña para convencer a los tratantes de que Jorah es un gran guerrero (algo que es cierto) y obtendrían mucho dinero de que luchara en las recien reabiertas arenas de lucha de Meeren (esta información la obtiene Tyrion cortesía de los tratantes).

Como Tyrion es tremendamente persuasivo y además uno de los protas, los tratantes deciden hacer lo que Tyrion les dice, así que ya tenemos de nuevo a Tyrion y Jorah de camino a Meeren.

En serio, Tyrion es lo más grande. Por cierto, que Tyrion todavía no sabe que el pobre Jorah se está convirtiendo en piedra cortesía de los monstruitos a los que conocimos en el episodio anterior. Me da mucha pena Jorah, porque también mola mucho y le veo muerto muertísimo de aquí a pocos capítulos y todavía no he superado lo de Ser Barristan.

En otro orden de cosas, mientras en Desembarco del Rey, Cersei da nuevas muestras de su gran mente de estadista (modo ironía off) y Meñique vuelve a demostrar que él, Tyrion y Varys tienen todas las neuronas (y en este caso además mala idea), que le faltan al resto de personajes.

Meñique regresa a Desembarco y se encuentra con Lancel y su panda de coleguis fanáticos. En serio Cersei, cómo se te ocurre darles tanto poder a esta horda de desquiciados. Lancel y compañía amenazan de forma no muy sutil a Meñique. Pero éste siendo como es, no les hace demasiado caso y se va a ver a Cersei.

Durante su entrevista, Meñique informa a Cersei que Sansa está con los Bolton (y que se va a casar con Ramsay Bolton para que los Chungo Bolton se puedan afianzar en el norte) y Stannis va a atacar Winterfell. Según Meñique esta batalla es una oportunidad estupenda para la Corona ya que puede matar dos pájaros de un tiro. Cuando uno de los dos aniquile al otro los soldados de los Lannister pueden caer sobre el vencedor debilitado y terminar definitivamente con dos focos tan importantes de rebelion.

Cersei no le ve nada claro, más que nada porque no tiene dinero para mandar a sus tropas. Pero Meñique le propone una solución muy beneficiosa para ambos. Los hombres del Valle de Meñique serán los que ataquen y cuando venzan, Cersei sólo tendrá que nombrarle Guardián del Norte.

Evidentemente Meñique se calla sus deseos de quedarse con Sansa ya que Cersei quiere ver su cabeza en una pica (literalmente).

Por otro lado Cersei tiene otro frente abierto: el encarcelamiento de Loras Tyrell por su homosexualidad. Lady Olenna ha llegado a la capital tras la llamada desesperada de Margarery para que solucione lo de Loras.

Olenna supone con razón que Cersei está detrás de todo para dar un escarmiento a los Tyrell y que éstos sepan cuál es su lugar.

Cuando Olenna va a hablar con Cersei para que ésta libere a su nieto, Cersei se lava las manos diciéndole que es cosa de la Fe, que ella no ha tenido nada que ver. Pero que está segura que una vez que pase el juicio al que Loras va a ser sometido, la Fe se tranquilizará y le pondrán en libertad.

Sin embargo, el juicio no va como nadie espera ya que no sólo no sueltan a Loras debido a la confesión de uno de sus amantes sino que encima también detienen a Margaery por haber mentido para proteger a su hermano (y en estas Tommen presente y sin abrir la boca, menudo poder que tiene el rey, madre mía).

Evidentemente decir que Olenna está enfadada es decir poco. Si yo fuera Cersei me andaría con ojo porque me da que lady Olenna va a buscar venganza por la situación de sus nietos.

En otro orden de cosas y en la trama tonta de la semana, nos vamos a Dorne. Si, ese sitio donde solo dos personajes (el príncipe Doran y Areo Hotah) tienen las neuronas en su sitio y no dan vergüenza ajena. Jaime es mi personaje favorito y Bronn mola mucho, pero esta trama es infumable. Creo que ni Tyrion podría salvarla.

En Dorne vemos como, cosa rara en esta serie, tenemos a dos prometidos a la fuerza que se han enamorado. Trystane y Mircella pasean del brazo por los jardines muy acaramelados ante la mirada de Doran y Areo Hotah que tienen bastante claro que van a tener que proteger a los tortolitos.

Mientras, Jaime y Bronn se camuflan entre los mercaderes que van al palacio para meterse en él e intentar llevarse a Myrcella, que no está muy contenta que digamos de ver a tío Jaime y menos cuando Bronn deja inconsciente a su amado.

En el momento en que Jaime y Bronn se quieren llevar a Myrcella, a rastras si es preciso, aparecen esos personajes absolutamente ridículos que son las serpientes de la arena, que tras haber hecho un juramento con Ellaria (de ahí el Unbowed, Unbent, Unbroken del título) se dirigen a secuestrar a Myrcella para vengar la muerte de Oberyn (en serio, lo de estas con vengar a Oberyn por haber sido asesinado por su propia estupidez es del género tonto).

Total, que tras una pelea absolutamente cómica, aparece Areo Hotah para poner paz y llevarse detenido a todo el mundo, Ellaria incluida. Y en esta tontería hemos perdido 10 minutos de episodio en los que nos podían haber sacado la trama del Muro.

Por otro lado, nos vamos a la boda de Sansa y Ramsay. Evidentemente Sansa no es la novia más feliz del mundo y menos teniendo en cuenta que el "padrino" es Theon al que ella cree responsable de la muerte de sus hermanos y que Miranda le ha comentado, con toda la mala idea del mundo, algunos detallitos de la personalidad de Ramsay.

Sin embargo eso no será lo peor, lo peor será la consumación del matrimonio, con Theon de testigo obligado por Ramsay y cuya cara es lo último que vemos mientras se la caen las lágrimas y escuchamos los gritos de dolor de Sansa. En serio, ¿cuándo van a exterminar a los Bolton? Porque creo que ya va siendo hora.

El episodio me ha gustado, aunque he echado de menos la trama del muro, que podían haberla introducido perfectamente en lugar del esperpento de Dorne. A Lady Dragón y su amor por quemar vivo al personal no les he echado de menos para nada.

Admito que no soy fan de Arya, pero es que su trama es aburridisima y muy lenta. A ver si empieza pronto a coger ritmo porque ahora mismo resulta soporífera (y Arya bastante repelente).

Me encantan Tyrion y Jorah por separado (Peter Dinklage e Iain Glenn son geniales) pero juntos son un epic win. Me ha gustado muchísimo la escena en la que Tyrion le dice a Jorah que su padre ha fallecido, la grata impresión que le causó cuando le conoció y la forma en la que murió (traicionado por sus propios hombres). Ha sido una escena que ha denotado gran sensibilidad por parte de los personajes y los actores.

También me ha gustado que alguien expresara las dudas lógicas, coherentes y razonables acerca de la idoneidad de Daenerys para ser la reina de Poniente. Y tiene mucho sentido que haya sido Tyrion, el personaje más coherente y cabal de toda la serie. Aunque sospecho que en cuanto vea a los dragones se le van a pasar las dudas. Es que Tyrion es demasiado fan de los dragones para pensar con claridad.

Por cierto, que de lo de ver luchar a Jorah en las arenas de Meeren y el previsible encuentro de Daenerys con ambos se presentan muy interesantes.

Eso si, me da mucha pena que parezca que Jorah está sentenciado. No me hace ninguna gracia esa manía de la serie de ir matando a personajes secundarios molones que todavía están vivos en los libros.

La trama de Desembarco del Rey ha resultado tan interesante como de costumbre. Menudo follón que tienen montado con el encarcelamiento de Loras y ahora también de Margaery. Lo de Cersei no tiene remedio. Es que la pobre es tonta de remate. La veo acusada por incesto en 3, 2, 1.., vamos, lo que tarde Olenna Tyrell en ir a hablar con el Gorrión Supremo. Y con el cabreo que lleva la reina de las espinas por la detención de sus nietos, no creo que tarde mucho. A todas estas, ¿Tommen qué pinta en todo esto? Porque digo yo que siendo el rey tendría que haber dicho algo acerca de que detengan a su mujer. A otro al que le veo el futuro negro.

Por cierto, Meñique es muy grande. Yo no se a cuántos se la ha jugado ya pero su objetivo es claro, que le nombren Guardián del Norte y quedarse con Sansa de rebote.

Del despropósito de Dorne mejor no hablar porque ha dado mucha vergüencita ajena. Que forma de desperdiciar a Jaime y a Bronn. Creo que las serpientes de la arena son los personajes más petardos e insustanciales que han metido en esta serie.

Por otro lado, hablemos de lo de Sansa. Ramsay Bolton se merece lo peor de lo peor y a ver si la serie se estira y nos da lo que llevamos esperando dos temporadas, el exterminio de los Bolton de la forma más cruel posible. A ver si Theon reacciona pronto y ayuda en esos menesteres. Eso si, grandísimo trabajo de Alfie Allen, Sophie Turner e Iwan Rheon.

LO MEJOR: Tyrion/Jorah, la trama de Desembarco, la trama de Winterfel y todos sus actores

LO PEOR: Dorne. Sin más

PUNTUACIÓN: 9/10