viernes, 10 de julio de 2015

ELEMENTARY 3X21 UNDER MY SKIN


(contiene spoilers)

Buen episodio de Elementary, con un caso de la semana bastante interesante (aunque muy desagradable) y una buena trama secundaria con Sherlock y Alfredo, que a mi personalmente me ha gustado más que la trama principal del episodio.

El caso de la semana se centra en el asesinato de dos paramédicos de una ambulancia en las puetas del hospital al que trasladaban a una paciente. Una vez que mató a los paramédicos,  a continuación el asesino cogió la ambulancia y se le llevó del lugar con la paciente dentro.

El asesino ni se molestó en ocultar su rostro de las cámaras de seguridad del hotel aunque si se paró a recoger los casquillos de las balas que disparó (pero no lo suficientemente bien ya que Sherlock encuentra un casquillo que la policía puede  relacionar con un crimen e identificar al asaltante).

Durante el interrogatorio en comisaría, el asesino afirma haber matado también a la mujer que secuestró. Sin embargo, cuando la policía llega al lugar donde el asesino ha indicado que encontrarían el cadáver, si que encuentran la ambulancia y a la mujer muerta dentro pero el forense sitúa su muerte unas horas antes de que la policía encontrara el cadáver. Por ello, era materialmente imposible que el asesino de los paramédicos fuera también quién mató a la mujer. Esto hace que Sherlock, Joan y la policía sospechen que el asesino tiene un cómplice.

Pero la hora de la muerte no será lo único sorprendente que arrojará el informe de la autopsia. Resulta que al abrirla el forense encontró que le faltaban la mitad de sus órganos, como si alguien hubiera querido hacer sitio para algo.

Esto, unido a un material que encuentran en la ambulancia recuperada da lugar que Sherlock indique que la mujer era una "mula" y transportaba droga en su anterior.

Durante la investigación se descubre que la mujer había viajado recientemente a Brásil para someterse a una reducción de estómago ya que allí la operación era ostensiblemente más barata que en Estados Unidos. El doctor que la había operado, en lugar de reducirle el estómago, lo que había hecho era hacer sitio en su cuerpo para la heroína que quería transportar.

La policía intenta sin éxito ponerse en contacto con el médico que llevó a cabo la operación, pero llevaba desde el día que operó a la víctima "desaparecido".

Para poder localizar la droga que transportaba la víctima, la policía se pone en contacto con Yanko, un conocido traficante para que les avise si alguien ha corrido la voz de que vende una gran cantidad de heroína. Si Yanko les avisa, el detective Bell le promete que se podrá quedar con el cargamento.

Toda la negociación con Yanko tiene lugar en la consulta de su dentista, lugar que Yanko y su gente han "invadido" para establecer allí sus oficinas debido a que la confidencialidad médico-paciente le impedía a la policía poner cámaras en la consulta del dentista. Decir que el dentista no está contento con este arreglo, es decir poco.

Sin embargo el plan de la policía se va al traste cuando Yanko aparece muerto, junto con su guardaespaldas en la puerta de la casa de su amante. Parece que alguien ha avisado a un cártel chino rival del lugar al que iría Yanko y se le han quitado de enmedio.

En paralelo la policía descubre que otros dos americanos que fueron a Brásil para someterse a operaciones de reducción de estómago han desaparecido.

El caso dará un giro inesperado cuando el dentista de Yanko se presente con su abogada y dos dedos menos cortesía del cártel chino que le había sonsacado la localización de Yanko a base de cortarle dedos. El dentista está dispuesto a contar todo lo que le escuchó a Yanko y sus secuaces a cambio de inmunidad y para empezar les dice que la operación de la gente funcionando como mulas trayendo droga sin saberlo desde Brásil había sido idea de Yanko. El le había oído hablar con su gente e incluso le da a la policía la localización de las dos personas desaparecidas, que habían sido arrojadas en un lago.

Sin embargo, al localizar a estas personas, a las que habían abierto, introducido piedras en su interior y posteriormente cosido para que se hundieran en el lago, Joan descubre que los puntos habían sido hechos por un médico o similar. Por el tipo de hilo utilizado puede decirse que la persona que cosió a las dos víctimas podía trabajar en cirugía oral.

Eso, unido a que una investigación de la vida del dentista que saca a la luz que él y el médico brasileño habían sido compañeros de habitación en la universidad hace que la policía sospeche que ha sido el dentista y no Yanko quien ha organizado toda la operación de Brásil.

Por ello y para hacerle confesar, utilizan a un policía chino para simular que una persona del cártel chino que le había amputado los dedos al dentista se había presentado en la comisaría a preguntar con él.

El truco surte efecto y el dentista lo confiesa todo, a pesar de que su abogada le advierte que el supuesto traficante chino lo más probable es que sea un policía de incógnito algo que se demostrará finalmente cierto.

En la trama secundaria del episodio tenemos a Sherlock preocupado por Alfredo, su espónsor, después de descubrir que un detective privado al que había detectado en una de las reuniones le estaba investigando por orden de sus antiguos jefes.

Tras investigar la situación, Sherlock va a hablar con Alfredo para comentarle que alguien ha "robado" o más bien movido una serie de coches en el vecindario (a veces cambiándolos de lugar de aparcamiento o moviéndolos dentro de la misma calle en la que estaban aparcados).

Curiosamente todos ellos tienen el sistema de seguridad patentado por la empresa donde trabajaba Alfredo hasta hace unos días cuando tuvo una fuerte discusión con su jefe tras negarse éste a implementar las mejoras que Alfredo había ideado para una serie de fallos que había descubierto recientemente.

Sherlock sospecha que Alfredo ha movido los coches para vengarse de su antigua empresa y demostrar que tenía razón. Alfredo se enfada mucho con Sherlock y le explica que lo hizo porque su antiguo jefe había ido hablando mal de él a otros clientes acusándole de estar nuevamente consumiendo y él no podía permitir eso después de lo mucho que se había esforzado en mantenerse limpio.

Alfredo le dice a Sherlock que es su espónsor, no su amigo. Que si le necesita en cualquier momento que sienta tentación de volver a consumir le puede avisar, pero que no se puede meter en su vida.

Sherlock sigue su consejo y al día siguiente le manda un mensaje a Alfredo para que se reuna con él en un sitio porque ha sentido la necesidad de volver a consumir. Sin embargo, cuando Alfredo llega al lugar, Sherlock no está por ninguna parte y no se presenta.

Al día siguiente, la policía para a Alfredo por la calle para interrogarle por el último movimiento de vehículos que tuvo lugar la noche anterior. Alguien había movido 12 coches de una tacada y la policía quería saber dónde estuvo Alfredo la noche anterior en unas horas determinadas.

Como el lugar en el que Sherlock le había citado estaba muy lejos de donde él vivía y había tenido que coger multitud de autobuses, existe constancia de que él no pudo robar los coches, por lo que Alfredo tiene una coartada para el robo de la noche anterior y también de paso para el resto de robos.

Alfredo va a hablar con Sherlock que no niega ser el responsable del movimiento de coches y le dice a Alfredo que él le considera su amigo y que si tiene que cambiar de espónsor para que sean amigos lo hará. Alfredo acepta y le propone presentarle a algunas personas que podrían ser su nuevo espónsor.

El episodio me ha gustado aunque el caso de la semana me ha parecido más inquietante y desagradable que de costumbre.

Eso si, un episodio más ha resultado obvio desde el principio que el dentista estaba involucrado y en esta ocasión además la trama del caso me ha convencido menos que otras veces.

El personaje de Yanko me ha parecido demasiado cliché y el trato que le ha ofrecido Bell para convencerle no me ha resultado para nada creible (lo de que la policía le deje al traficante quedarse con un cargamento a cambio de su colaboración no lo veo mucho).

Sin embargo me ha gustado mucho la trama de Sherlock y Alfredo. Parece que Sherlock se está volviendo cada vez más humano y el número de personas por las que está interesado aumenta de temporada en temporada. Me ha parecido adorable la forma en la que se las ha apañado para darle a Alfredo una coartada. Muy original

LO MEJOR: La trama secundaria de Sherlock y Alfredo

LO PEOR: Lo previsible que ha sido el caso

PUNTUACIÓN: 7/10

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