GAME OF THRONES 5X04 THE SONS OF THE HARPY

(contiene spoilers)

Esta semana hemos tenido otro muy buen episodio de Game of Thrones y ya van cuatro seguidos. Hay que reconocer que esta temporada ha empezado muy, muy fuerte. En esta ocasión han sido Arya, Brienne y Pod los personajes principales que no han aparecido en el capítulo. Por contra hemos tenido la vuelta del duo dinámico Jaime y Bronn en su periplo hacia a Dorne. Además, la estupidez de Cersei sigue aumentando a medida que pasan los episodos y nos han regalado unas cuantas menciones a personajes y situaciones que tiene pinta de que van a ser importantes en un futuro.

Empezaremos por ese lugar en el que como te descuides te clavan un cuchillo en la espalda más conocido como Desembarco del Rey. Esta semana, la idea "feliz" de Cersei ha sido permitir a los fanáticos seguidores del Gorrión Supremo, formar una especie de ejército, armarse hasta los dientes  y ejercer la "justicia" que ellos crean conveniente.

El primer objetivo de la secta son los burdeles de Meñique y las personas que los frecuentan. Pero después empiezan a castigar a personas cuyo comportamiento ellos no consideran digno. Entre estas personas se encuentra Loras, el hermano de la reina, homosexual que no oculta que le gustan los hombres.

Lógicamente la detención de su hermano enfada mucho, muchísimo a Margaery, que va a reclamarle a Tommen que su madre ha encarcelado a su hermano.

El pobre Tommen, que está en el medio de la guerra abierta entre las dos mujeres, no sabe de lo que le habla Margaery pero promete ir a hablar con su madre para arreglar el asunto. Sin embargo, como Margaery no confía demasiado en las habilidades de persuasión de su joven esposo, decide escribir a su abuela, Olenna, a la que ve mucho más capacitada para arreglar todo el asunto.

En otro orden de cosas, Cersei manda a Mace Tyrell, flamante nuevo consejero de la moneda a Braavos a negociar con el Banco de Hierro, que les ha escrito pidiéndoles el dinero que le deben (que es mucho, por otra parte). Cersei decide mandar con él para que le proteja a uno de los guardias reales, Meryl Trant. Si, Cersei manda a Braavos, lugar en el que está Arya, a uno de las personas de su lista. Parece que la pequeña de los Stark va a poder empezar por fin a tachar nombres de su particular listado. Para mi que Meryl Trant tiene los días contados.

Tommen va a hablar con Cersei para pedirle que libere a Loras. Pero Cersei le responde que ella no le ha encarcelado, que ha sido la Fe (la secta del Gorrión Supremo) y que si quiere sacar de la cárcel a su cuñado tendrá que ir a hablar él mismo con el Gorrión Supremo.

Esto de que Cersei, cuya única buena cualidad digna de mención es querer a sus hijos, mande a su hijo pequeño a hablar con la panda de fanáticos que patrullan Desembarco, no se sostiene por ningún sitio, pero bueno.

El pobre Tommen va a hablar con el Gorrión Supremo, pero sus seguidores no le dejan pasar, alegando que está rezando. A todas estas, los guardias que acompañan a Tommen parecen dispuestos a arrasar con la mitad de la panda de fanáticos que les impiden el paso mientras la gente empieza a llamar a Tommen, abominación y otra serie de lindezas semejantes.

Tommen decide irse del lugar para no provocar una masacre. Sin embargo, este gesto que denota lo noble que es el chico, puede ser interpretado como un síntoma de debilidad que le puede costar caro.

En resumen, Cersei ha metido a su hijo y de paso se ha metido ella misma (porque, ¿hasta cuando esperará la Fe para castigar a una adúltera que para más inri se sospecha que mantiene una relación incestuosa con su hermano? Para mi que no mucho), en un buen lio. Cersei es bastante, bastante tonta.

Por otro lado, nos vamos a Invernalia, con Sansa y Meñique. Sansa, está encendiendo velas en las criptas de sus ancestros cuando Meñique va a informarle de que se va ya que Cersei le ha mandado llamar. Esto no entusiasma a Sansa, ya que quedarse sola con los Bolton le da bastante miedo (de hecho, Roose Bolton le inspira terror a Sansa como ella misma confiesa).

Sin embargo Meñique le asegura que estará bien y le explica que Stannis está en el Castillo Negro y que pronto marchará hacia Invernalia para intentar arrebatársela a los Bolton. Según Meñique, Stannis es la mejor mente militar de Poniente y tiene muchas papeletas para derrotar a los Bolton. Si eso sucediera, Meñique tiene claro que Stannis nombraría a Sansa (única heredera de Ned Stark, el hombre que murió por declarar que Stannis era el rey verdadero) guardiana del Norte.

Sansa le pregunta qué pasará si Stannis es derrotado. Meñique no cree que eso pase, pero si lo hiciera, ella ya tiene medio engatusado a Ramsay y de todas formas se convirtiría en la señora de Invernalia.

Vamos, que de acuerdo a los planes de Meñique, lo de Sansa con Invernalia es un win-win de manual (si obviamos el hecho de la posibilidad de casarse con el horripilante Ramsay).

En esta conversación también tenemos una mención a Rhaegar y Lyanna. Meñique le cuenta a Sansa la historia del torneo de Harrenahal, que le ganó el príncipe Rhaegar a Barristan Selmy y cuyo trofeo (una corona de rosas) entregó a Lyanna Stark (ya prometida a Robert Baratheon) en lugar de a su esposa Elia Martell.  Vamos, que Rhaegar tenia una mano izquierda... Sansa le responde a Meñique que muy bonita la historia pero que teniendo en cuenta que más adelante Rhaegar secuestró y violó a Lyanna provocando la guerra que llevó a Robert al trono, pues como que la historia no mola nada.

Mientras tanto, en el Castillo Negro, Melissandre se insinúa a Jon, pero éste la rechaza, además de por sus votos como hermano de la Guardia de la Noche, porque sigue enamorado de Ygritte. Esto no parece que a Melissandre le haga mucha gracia, que se va de la habitación en la que se encuentran pronunciando, un "You know nothing Jon Snow", que deja al pobre Jon (y a la audiencia de paso), bastante impactado. Esta mención me ha dado muy malas vibraciones. Pero qué chunga es Melissandre, leche.

Todavía en el Castillo Negro, volvemos a constatar que Selysse podría ser perfectamente una de las candidatas a peor madre de la televisión, cuando habla despectivamente a Stannis sobre su hija Shireen.

Sin embargo, Stannis no comparte la animadversión de su esposa por su hija ya que cuando Shireen le pregunta directamente si se avergüenza de ella, aunque no le contesta a la pregunta (después de todo Stannis es estoico y poco sentimental), le cuenta a su hija la historia de cómo contrajo la enfermedad que la dejó marcada la cara y que casi le cuesta la vida (por culpa de una muñeca infectada que Stannis le compró a un comerciante de paso). Stannis llevó a los mejores médicos para que curaran a su hija y lo lograron. La gente le decía a Stannis que abandonara a su hija en las antiguas ruinas de Valyria, pero Stannis se negó . Ella era la princesa Shireen de la casa Baratheon y sobre todo, era su hija. Esto emociona mucho a Shireen que se lanza a los brazos de su padre. Ha sido una escena muy bonita y muy emocionante. Stannis ha ganado unos cuantos minipuntos esta semana.

Por cierto, Stannis también tiene una frase bastante curiosa relativa a que lo de hacer bastardos no era propio  de Ned Stark, refiriéndose a Jon.

Por otro lado, en este episodio vuelve a aparecer el duo dinámico : Jaime y Bronn, que van de camino a Dorne. Bronn quiere saber porque está tan empeñado Jaime en salvar a su "sobrina", que podía haber mandado a otra gente, gente con dos manos y esas cosas. Pero Jaime asegura que tenía que ser él. Además, no querían provocar una guerra, de ahí la misión de infiltración.

Esto.. Jaime, molas y esas cosas, pero como pillen de paseo por Dorne al hermanísimo de la reina, que además es uno de los hombres más odiados de Poniente y encima pertenece a la casa Lannister (si, esa a la que los Martell "quieren tanto") , sin que sea una visita oficial, pues digo yo que los dornienses no se lo van a tomar muy allá. Y si encima tu sutileza (y la de Bronn, ya que estamos) no son especialmente reseñables, pues tienes muchas papeletas para liarla parda y provocar la guerra de todos modos.

De esa conversación sacamos que Bronn sabe que los retoños de Cersei son de Jaime (a estas alturas lo debe saber todo Poniente), que fue Jaime fue quien liberó a Tyrion (aunque Jaime sigue afirmando que no fue él sino Varys), que Jaime está muy cabreado con Tyrion por matar a su padre y amenaza con matarle la próxima vez que le vea (esto no se lo cree ni él) , que la muerte perfecta para Jaime es morir en brazos de su amada (a lo que Bronn le pregunta que si la de ella también lo es, qué mala leche tiene Bronn. Esta afirmación de Jaime la veo un tanto profética) y que Bronn querría morir en su cama tranquilamente, que ya ha tenido bastantes aventuras en su vida y que su muerte quiere que sea tranquila.

Por cierto, también tenemos una escena de Jaime mirando la isla de Tarth con cara de tonto. Vale, señores guionistas, captamos la indirecta, Jaime se acuerda de Brienne. Eso mola, pero podíais juntarles en una trama y no mandarles a cada uno a una punta de Poniente.

Una vez en Dorne, Jaime y Bronn tardan cero coma en meterse en líos (vale, esto no era algo que esperáramos, ¿verdad?) y se tienen que enfrentar a una patrulla de soldados dornienses. Bronn se carga a tres demostrando una vez más que es los mejores luchadores de la serie y Jaime a uno, en una pelea bastante digna para luchar con su mano izquierda. Además, le ha encontrado utilidad a esa horrorosa mano de oro que lleva puesta.

Jaime le dice a Bronn que entierre los cadáveres, para seguir con su idea de que la infiltración sea sútil.. pero vamos, que no se para qué porque el capitán del barco que les llevó a Dorne ya le ha ido con el cuento a Ellaria y a las serpientes de la arena. Ya saben que Jaime está en Dorne y además planean saltarse a la torera las indicaciones de Doran con respecto a Myrcella. A ver nenas, que a mi me encantaba Oberyn, pero su muerte se la buscó el solito y ni Cersei, ni Jaime, ni sobretodo la pobre Myrcella tienen la culpa de eso. De hecho, si no hubiera sido tan tonto en la pelea, lo mismo estaría vivo.

En otro orden de cosas, seguimos con la trama de Tyrion secuestrado por Jorah para llevárselo a lady dragones. Tyrion tarda como 2 segundos en reconocer a Jorah, acordarse de que espiaba a Daenerys y le mandaba sus informes a Varys y deducir que Daenerys descubrió la traición de Jorah y le desterró y que por eso le lleva a él ante ella, para ganársela de nuevo. Pero que no hubiera hecho falta secuestrarle y menos que le lleve atado, él iba a Meereen de todos modos, así que no va a intentar escaparse.

Me encantan Tyrion y su lucidez mental, a ver si empieza a tener más protagonismo en próximos episodios que en estos cuatro primeros ha estado pelín infrautilizado. Como me alegro que los guionistas hayan decidido mandarle a la trama de Daenerys que necesita como el comer buenos personajes secundarios.

Hablando de Daenerys, vemos una conversación entre ella y ser Barristan (como me gusta este hombre)  en la que éste le cuenta cómo era su hermano Rhaegar (vale, dos menciones a Rhaegar en el mismo capítulo, parece que los guionistas nos quieren decir algo). Según Daenerys, su hermano Viserys le contó que era un gran guerrero. Ser Barristan le dice que si, que era buen guerrero pero que lo que realmente le gustaba a Rhaegar era la música, cantar para la gente.

Sin embargo, la converesación es interrumpida porque el cansino del representante de los nobles de la ciudad se ha presentado en palacio para intentar convencer a Daenerys de que abra las arenas de lucha, otra vez. Pero Daenerys sigue firme en su posición de que va a ser que no.

La gente está cada vez más revuelta en Meeren y los hijos de la arpía aprovechan la oportunidad para lanzar una ofensiva contra Daenerys y sus hombres, atacando el palacio.Gusano Gris y ser Barristan encabezan la defensa, derrotando a muchos de los atacantes. Pero se ven superados en número y ambos resultan heridos de gravedad, sobre todo ser Barristan, que parece que no va a llegar al próximo capítulo. Mucho me sorprendería que se salvara. Pobre Barristan con lo majo que es y sobre todo, para un personaje interesante que hay en Meereen van y se lo cargan.

El episodio me ha gustado mucho y el final ha sido realmente impactante. Parece que esta temporada salimos a muerte importante cada dos episodios, primero Mance Ryder, luego ser Barristan. A estas alturas, temo bastante la suerte que puede correr Bronn en Dorne.

En Desembarco ya ha empezado a liarse parda gracias a las "grandes ideas" de Cersei. En serio, que alguien destituya a esta mujer como reina regente. ¿Cómo se le ocurre armar a los seguidores del Gorrión Supremo? Va a conseguir que el pueblo se levante en contra Tommen en cero coma. Pobre Tommen, con lo buen niño que es y teniendo que mediar entre su madre y su esposa. Además, el gesto de no querer luchar contra los fanáticos creo que le va a costar caro. Lo van a ver como un signo de debilidad. A ver si vuelve Olenna a Desembarco por todo el asunto de la detención de Loras y tenemos pelea de gatas, no soterrada sino cara a cara.

Por cierto, lo de que a Loras le iba a traer consecuencias el no ocultar su tendencia sexual se veia venir después del comentario de Margaery hace un par de capítulos.

En esta serie nadie da puntada sin hilo y en este episodio parece que se han dedicado a mencionar como quien no quiere la cosa un montón de cosas que pueden afectar a los próximos capítulos (las dos menciones a Rhaegar, la historia del torneo de Harrenahal, lo de Jaime muriendo en brazos de su amada, Jaime mirando la isla de Tarth, que Stannis duda que Jon sea realmente hijo de Ned..).

Jaime y Bronn molan muchísimo juntos y esta historia promete. Sus conversaciones, con sus puyas soterradas son geniales. Hay que ver cómo mejora Jaime lejos de Cersei (guionistas, tomad nota). Eso si, las serpientes de la arena y Ellaria me han chirriado mucho, mucho. Vamos que me han causado una impresión horrorosa, todo lo contrario que Doran hace un par de episodios.

Meñique sigue demostrando ser un capullo, pero realmente le ha buscado a Sansa la mejor solución de las posibles (suponemos que él no sabe que Ramsay es un psicópata). Tal y como le ha explicado a Sansa, ella estará a salvo y será la señora de Invernalia, pase lo que pase. Vale, que para eso tiene que tragarse a los Bolton y Meñique gana aliados en su eterno juego de ajedrez imaginario, pero ha dejado a Sansa protegida y en buena posición.

Esta semana, la trama del muro me ha vuelto a encantar y eso que no ha tenido tanto protagonismo como otros episodios. Melissandre da muy mal rollo (lo del you know nothing Jon Snow, me ha dado escalofríos) y no se cómo se tomará el rechazo de Jon (que por cierto ha estado inmenso cuando la ha mandado a paseo).

Stannis va mejorando cada episodio que pasa (otro por el que temo por su vida). Su escena con Shireen ha sido preciosa. No me extraña que la niña se haya emocionado. Su padre no es muy expresivo pero realmente la quiere. Y para la pobre Shireen eso es un consuelo grande teniendo a la madre que tiene (qué bruja que es Selysse).

El final del episodio con la casi segura muerte de Barristan ha sido muy impactante. Parece que la trama de Daenerys se anima, aunque haya sido a costa de perder a uno de los mejores personajes que tenían allí. Es una pena que ser Barristan no le pueda seguir contando a Daenerys historias sobre su familia.

En otro orden de cosas, qué mal me cae el representante de los nobles. Qué hombre más pesado.

A ver si llegan pronto Tyrion y Jorah (otro duo que promete). Da la sensación que Peter Dinklage tendría química hasta con una farola de la calle. Sus escenas son buenísimas le pongan al compañero que le pongan, ya sea Bronn, Jaime, Pod, Cersei, Varys, su padre, Meñique, Joffrey y ahora Jorah. Tengo curiosidad por verle con Daenerys.

Por otro lado, no he echado de menos a Arya. Su trama no me molesta como me puede pasar con la de Daenerys en algunos momentos, pero me resulta bastante indiferente.

LO MEJOR: Final impactante, la trama avanza

LO PEOR: Muy poco muro esta semana

PUNTUACIÓN: 9.5/10