EL MINISTERIO DEL TIEMPO 1X01 EL TIEMPO ES EL QUE ES

(contiene spoilers)

Después de una gran campaña publicitaria a todos los niveles (Televisión Española, esta vez si se ha puesto las pilas) y el aplauso prácticamente unánime de la crítica que habían visto el episodio piloto por anticipado (ayer nos estuvieron recomendando por activa y por pasiva  en internet que viéramos la serie) por fin pudimos ver "El Ministerio del Tiempo". Veredicto: Tenían razón, el hype tenía sentido. La cosa mola mucho, de hecho mola muchísimo.

El episodio empieza en lo que parece haber sido un campo de batalla y un cartel nos indica que estamos en Flandes en 1569 (vale, ahora nos situamos, estamos en la época de los tercios).

En la siguiente escena nos encontramos a dos hombres, en concreto dos militares, que discuten. El que parece ser el superior le pregunta al otro por qué atacó. Porque vos me lo mandasteis es la respuesta del hombre. ¿Teneis pruebas de ello? La respuesta,  "Mi palabra". Parece que el superior intenta echarle la culpa de una pésima decisión militar a su subordinado pero éste no parece por la labor de aceptarlo, principalmente por la cantidad de muertes que ocasionó la inutilidad de su superior. La discusión termina con el subordinado pegando a su superior con un palo.

Evidentemente, esto no es algo recomendable de hacer ni en el siglo XVI ni hoy en día, pero en el siglo XVI te costaba directamente la sentencia a muerte que es a lo que va a enfrentarse el hombre, que nos enteramos que se llama Alonso (y que es interpretado por Nacho Fresneda) y al que vemos despedirse de su mujer Blanca en la siguiente escena. Alonso le pide a Blanca que siga con su vida y le olvide.

Cuando Blanca se va, Alonso ve entrar en su celda a un fraile y a un hombre encapuchado. El fraile se le acerca y le pregunta si es Alonso Entrerrios. Alonso le responde que si y el fraile ( que más adelante sabremos que se llama Ernesto, interpretado por Juan Gea) le hace un curioso ofrecimiento. Conmutar su sentencia a muerte por su entrada en un cuerpo secreto que sirve al Estado y en el que podrá luchar por su patria. ¿Trabajar como espía pregunta Alonso? Algo por el estilo es la respuesta del fraile. Eso si, para todos tus conocidos, incluida tu mujer, estarás muerto. Alonso tarda cero coma en aceptar más que por evitar la muerte por el enorme sentido del deber y el patriotismo que tiene y que desde su primera escena hemos podido adivinar.

Es el turno de la presentación del siguiente personaje y la serie nos lleva a Barcelona, concretamente a la universidad, en 1880.

Allí vemos cómo un hombre imparte una lección de literatura (sobre Lope de Vega) a un grupo compuesto principalmente por hombres.. o no porque de repente vemos al maestro torcer el gesto al ver una mano levantada y sobre todo al ver, a quien pertenece esa mano. Se trata de una mujer, la única que hay en la sala. La chica, Amelia Folch (Aura Garrido), intenta hacer una pregunta y posteriormente algunas observaciones sobre la lección pero el maestro rápidamente la quita la palabra.

Durante la clase, alguien le pasa una nota a Amelia y esta sale fuera y al ir a una sala a encontrarse con quien le había enviado la nota, descubre a otra mujer, a la que no conoce y que se presenta como Irene Larra (Cayetana Guillén-Cuervo).

En esta escena, vemos como Irene recluta a Amelia diciéndole que con su capacidad intelectual ese mundo se le queda pequeño. Amelia tiene inquietudes distintas a las de encontrar un marido y tener hijos y en esa época todo su potencial está desaprovechado. Bueno, Irene, también intenta ligar con Amelia, algo que ésta declina ya que, aunque ella no necesita a los hombres para sentirse realizada son lo que le gustan.

Finalmente, es el turno de presentarnos al protagonista principal de la serie, Julián Martinez (Rodolfo Sancho). Un enfermero del SAMUR bastante temerario y con poco apego a su propia vida desde que su mujer (que había sido su novia desde el instituto) fallece en un accidente de tráfico.

Julián, uno de los nuevos reclutas del Ministerio

Julián y su compañero (a pesar de que no tenían que hacerlo), acuden a un aviso de un edificio donde se está produciendo un incendio. Aunque los vecinos dicen que no queda nadie en el edificio, Julián cree ver a alguien y se mete dentro del edificio sin autorización.

Ya dentro del edificio, Julián ve a un hombre, aparentemente muerto, y a otros dos hablando. Todos parecen llevar ropas de principios del siglo XIX. Julián ve esto entre sombras y a través de la máscara para gases que lleva puesta, justo antes de desvanecerse.

Con Julián ya en el hospital, aunque todavía inconsciente, vemos a su compañero y a su jefe hablar. Según su compañero nadie quiere trabajar con Julián debido a su actitud temeraria y ha habido bastantes quejas de otros compañeros. Aquí nos mencionan por primera vez el fallecimiento de la mujer de Julián.

Antes de despertar un Julián todavía inconsciente ve a un hombre y una mujer (Irene y Ernesto) en su habitación revisando sus diagnósticos.

Cuando Julián despierta, su jefe le dice que le han suspendido debido a una queja del cuerpo de bomberos y que aproveche para descansar y retomar la fotografía, su antiguo hobby.

Julián está en su apartamento mirando fotos de su mujer cuando alguien llama a la puerta. Al abrir ve al hombre y a la mujer del hospital, a los que toma por psiquiatras.

Sin embargo, cuando éstos le preguntan por los hombres a los que vio en el incendio, Julián se da cuenta de que esos dos no son psiquiatras si no una cosa bastante más rara. Pero en el estado emocional en el que está tampoco es que se plantée mucho quienes pueden ser.

Irene y Ernesto piden a Julián que les acompañe. Necesitan que les de información acerca de los dos hombres a los que vio y le llevan ante lo que, aparentemente, parece un edificio abandonado.

Sin embargo, al entrar se lleva una buena sorpresa porque, para empezar, una vez pasa lo que "parece" un patio en obras, se encuentra un claustro como el de un monasterio, en el centro del cual hay un pozo-escalera.

Una vez han bajado las escaleras, se encuentran a un montón de gente, vestidas de la forma típica de distintas épocas. Sin embargo, todo el edificio se asemeja bastante a un edificio oficial.

Irene y Ernesto le llevan con su jefe, que se presenta como Salvador Martí (Jaime Blanch) y que le explica tanto a Julián como a los espectadores de qué va este asunto del Ministerio del tiempo.

En época de los reyes católicos, un rabino judío, para evitar que su familia fuera ejecutada, le confío a la reina Isabel un secreto relacionado con la existencia de una serie de puertas, en distintos lugares que comunicaban distintos momentos y lugares de la historia.

Mientras le explica esto a un sorprendido Julián (que está absolutamente anonadado), van atravesando distintas puertas que les llevan por ejemplo a la época en la que se estaba construyendo el Acueducto de Segovia o al momento exacto en el que se pintó Las Meninas (eso si Velázquez no está y más tarde sabremos por qué).

La misión del ministerio es que nadie atraviese las puertas sin autorización y cambie algún acontecimiento de la historia. Julián quiere saber por qué no cambian las cosas malas que han sucedido. Salvador le responde que aunque el mundo actual no es perfecto podía ser peor.

Además, nos enteramos de que no se puede viajar al futuro porque "el tiempo es el que es".

Salvador le presenta a Julián al funcionario del ministerio encargado de realizar retratos robots y a partir de las descripciones vagas que Julián le da, el funcionario crea un retrato casi perfecto.

Julián se sorprende de lo bueno que es ese funcionario y Salvador le responde con una de mis frases favoritas de todo el episodio. ¡Cómo no va a ser bueno si el jodío es Velázquez!

Total, que Salvador le explica a Julián que las dos personas que vio provienen de 1808 y que están ahora mismo sueltos por Madrid con la posibilidad de acceder a información que pueda cambiar la historia.

Salvador quiere que Julián se una al ministerio. Bueno, más bien le obliga, ya que es o unirse a ellos o ir derechito al psiquiátrico cortesía de un informe monísmo que el propio Salvador ha redactado. Vamos, que se une o se une.

Lo gracioso de todo el asunto es que el Ministerio, con todo lo raro que es, si parece una oficina, ya que tiene hasta guardia de seguridad, hora del café..

Durante la hora del café, Julián conoce a Angustias, secretaria de Salvador y cuyo marido murió en la Guerra de Cuba (la buena señora no aparenta más de 50 años). Además, Irene le dice que ella misma nació en los años 30. Esto deja todavía más alucinado a Julián, al que definitivamente no le salen las cuentas (confieso que a mi tampoco mucho).

Irene intenta explicárselo. Por lo visto, en el Ministerio uno envejece a partir del momento en el que fue reclutado, aunque en tiempo real tenga más edad. Por ejemplo, Irene reclutó a Velázquez con 35 años de su época dos años antes por lo que, en edad del Ministerio, tiene 37. Vamos, que todo es un poco lioso. Julián sigue bastante alucinado.

Y más que alucina cuando Salvador le presenta a los que van a ser sus compañeros de escuadrón: Amelia y Alonso. Bueno, alucina principalmente con Alonso. Aquí, Julián pronuncia otra de mis frases favoritas del episodio: "Primero Velázquez y ahora el capitán Alatriste". El pobre Alonso, que este si que está muy, muy perdido, no entiende la referencia y le comenta a Julián que le confunde con otro, aunque no es la primera persona que lo hace...

Irene y Ernesto no ven muy claro la configuración de ese escuadrón y así se lo hacen saber a Salvador pero éste está convencido de que los tres se van a complementar a la perfección.

El nuevo escuadrón de reclutas: Amelia, Julián y Alonso

Mientras tanto, las dos personas que vinieron del pasado, un español y un francés, andan deambulando por Madrid y, además de encontrarse con un par de heavies en la Gran Vía, descubren que perdieron la Guerra y que según Napoleón ese fue el principio del fin.

Gracias a la información que encuentran en unos libros, parecen dar con la clave que les permitirá ganar la guerra y que más adelante veremos que es matar al "Empecinado".

El francés, antes de volver a su tiempo por la misma puerta por la que se fue, mata a un par de policías, le roba a uno de ellos su pistola reglamentaria y a continuación mata a su compañero español. El francés vuelve a 1808 con una pistola actual.

Por su parte el ministerio descubre, gracias a las cámaras de seguridad que los dos hombres han estado en una libreria y se han llevado libros de historia (bueno más bien robado) y nuestros nuevos reclutas más Irene y Ernesto se personan en la librería.

Allí, Amelia se emociona mucho al ver tanto libro y se sorprende ante la mención de internet (¿Inter que?) y Alonso por fin tiene su primer encuentro con el capitán Alatriste (en realidad con uno de sus libros, que aprovecha para llevarse a su casa y comprobar si, efectivamente, se parece a él tanto como dicen).

Cuando se descubren los cuerpos de los policías y del compañero del francés, el equipo del ministerio se da cuenta de que el francés ha vuelto a su época con información que no debería tener y además con una pistola de nuestro tiempo, por lo que decide enviar a los nuevos reclutas para arreglar el problema. Eso si, sin tener ningún plan previsto. ¿No somos españoles? Improvisen, le suelta Salvador a Amelia cuando la muchacha le pregunta qué es lo que tienen que hacer exactamente. El pobre Julián y sus compañeros cada vez lo flipan más y no me extraña. Salvador va ganando puntos a medida que pasa el capítulo.

Antes de comenzar propiamente con la misión tenemos algún que otro momento curioso como Irene dándole a Amelia unos tampones para que se los lleve de vuelta a su época (los reclutas viven en sus casas originales, salvo Alonso al que tuvieron que cambiar de ubicación por razones obvias) tras explicarle cómo funcionan. Cayetana Guillén y su Irene Larra son lo más.

También vemos cómo Julián va a un momento del pasado en el que sabe que estaria su mujer para volver a verla (todas las escenas de Julián relacionadas con su mujer son muy, muy tristes).

Una vez decidido que tienen que viajar en el tiempo a 1808 y evitar que el francés y su pistola destrocen la historia, Irene manda al trio a chapa y pintura y reaparecen como si estuvieran recien salidos de Curro Jiménez (y si, Rodolfo Sancho me ha recordado mucho a su padre).

Antes de irse Irene les dice que hay un funcionario que les espera y al que tienen que dar un sobre (que más tarde sabremos que es la comunicación oficial de que se queda sin paga extra).

Ya en 1808 Amelia, que como dijo Salvador es el cerebro del grupo, se da cuenta de que la idea del francés es matar al Empecinado (el guerrillero que dio con la tecla de cómo ganarles la guerra a los franceses).

Y el francés casi lo consigue, aunque termina muriendo a manos de Alonso (que por cierto, ha ligado con una criada a la que ha defendido de un francés y que le ha permitido al grupo descubrir bastante información). Sin embargo,  el francés ha herido de gravedad al Empecinado y Julián solicita por móvil al Ministerio (Irene le había dicho que gracias a un dispositivo especial tenía cobertura en otras épocas y hasta se podían hacer fotos) que manden a un médico de 2015 porque si no, el Empecinado no sobreviviría.

Durante esta aventura conocemos a un personaje intrigante, Lola Mendieta (Natalia Millán), antigua agente del ministerio a la que creían muerta en la época de las guerras carlistas y que no está muy claro si les ha ayudado o no, pero seamos sinceros, tiene pinta de mala y Natalia Millán lo bordaría.

Además, vemos como Julián vuelve una vez más al pasado para ver a su mujer y pasar la noche con ella sin que ella lo sepa. Alonso y Amelia se dan cuenta de lo que está haciendo y van a buscarle y pedirle que no lo haga más.

Julián les explica que a su mujer la atropelló un coche y que la noche anterior discutieron justo antes de que él se fuera a trabajar. Esa fue la última vez que habló con ella. Toda la vida juntos y las últimas palabras que se dijeron fueron de enfado.

Julián les promete que no lo hará más pero  que antes tiene que hacer una cosa. Más tarde le vemos llamar a su mujer por teléfono la mañana en la que él sabe que va a morir para disculparse por la bronca de la noche anterior. Al menos de esta manera, aunque no la recupere, tiene el consuelo de que al menos pudo hablar con ella y "despedirse" en cierta forma.

Al ampliar el plano de Julián, vemos a Lola que le observa detenidamente. Definitivamente esta mujer no se puede traer entre manos nada bueno.

El episodio ha estado genial. Me ha encantado. Me he reído, me he emocionado y hasta he aprendido cosas. Por una vez y sin que sirva de precedente todo el hype que ha precedido esta serie tenía razón de ser.

• La idea es super interesante y algo que no se había hecho hasta ahora en la televisión de nuestro país (por fin alguien se atreve con la ciencia-ficción).

• La factura de la serie es muy cinematográfica y visualmente la serie está muy bien hecha.

• Los personajes tardan como 5 segundos en caerte bien (el Alonso Entrerríos de Nacho Fresneda incluso menos) y prometen ser bastante interesantes tanto los principales como los secundarios. A los 10 minutos de episodio ya estaba más interesada en la historia de sus personajes que en los de muchas otras series que llevan más capítulos.

• Todos los actores están estupendos (aunque personalmente los que más me gustaron fueron Nacho Fresneda, Cayetana Guillén-Cuervo y Jaime Blanch, quizá porque sus personajes fueron los que tuvieron las mejores frases. Alonso es adorable en su estado de no enterarse de nada e Irene mola mucho, mucho y nunca pensé que diría eso de un personaje interpretado por Cayetana Guillén Cuervo que no es que me apasasione).

• Y encima nos cuenta cosas de la historia de España y tiene un perfil bastante didáctico, que encaja mucho con Televisión Española (me sentí totalmente identificada cuando al comentarle el personaje de Aura Garrido al de Rodolfo Sancho que él seguro sabía quien era el Empecinado, él le respondiera, "Si, si, pero mejor cuéntalo tú". Que el Empecinado era un guerrillero de la época de la Guerra de la Independencia, más o menos es conocido, qué es lo que realmente hizo, pues casi que no mucha gente lo sabe).

• La serie, a pesar de ser de ciencia ficción con toques históricos incluye bromas y chascarrillos muy accesibles a todos los públicos y muy autoreferenciales a la cultura española (¿Me puede dar su nombre? Si, Curro Jiménez", "Primero Velázquez, y ahora Alatriste", perdone ¿Quién es Alatriste? Es que me han confundido varias veces con él", "¿Y ahora nos quitan la paga de Navidad"?).  Tiene muchísimos más momentos cómicos de los que yo pensaba que tendría.

•  Los momentos dramáticos también están muy logrados y consiguen emocionar (especialmente todo lo relacionado con la historia del personaje de Rodolfo Sancho y su mujer).

Resumiendo una serie muy, muy, muy recomendable que tienes que ver urgentemente si aún no lo has hecho.

MEJORES FRASES/MOMENTOS

• "Qué bueno es" (Julián a Salvador refiriéndose al artista que había hecho el retrato robot de los hombres a los que había visto en el incendio). "Hombre, no lo va a ser si el jodío es Velázquez".

• "Primero Velázquez y ahora el capitán Alatriste" (Julián al conocer a Alonso).

• "Esto es como el argumento de la primera deTerminator"(Julián a Salvador cuándo este le explica a qué se dedica el Ministerio del Tiempo). "En serio chicos, teneis que ver Terminator" (Julián a Alonso y Amelia que le miran como si le hubiera crecido una segunda cabeza).

• "¿Cuál es el plan?" (Julián a Amelia sobre lo que deben hacer en 1808) "¿Qué plan? Somos españoles, improvisen" (respuesta de Salvador como si fuera lo más obvio del mundo).
• "¿Cuál es su nombre? Curro Jimenez" (Julián al posadero de 1808, en un homenaje de Rodolfo Sancho a su padre Sancho Gracia).

• Velázquez leyendo un libro sobre Picasso y haciendo experimentos cubistas.

• Alonso descubriendo los libros del capitán Alatriste y llevándose uno a casa para averiguar si se parece tanto al dichoso Alatriste como le dicen.

• Irene dándole a Amelia clases sobre la utilización de tampones.

• Irene conduciendo como una energúmena ante la atónita mirada de Alonso y Amelia.

El equipo al completo

LO MEJOR: La idea, la ambientación, el humor, los actores en general y Nacho Fresneda, Cayetana Guillén y Jaime Blanch en particular

LO PEOR: Estando muy bien me ha faltado un punto de socarronería en Rodolfo Sancho

PUNTUACIÓN: 9.5/10