GRIMM 3X22 BLOND AMBITION

(contiene spoilers)

Buen episodio de Grimm para terminar la temporada, en el que ha pasado prácticamente de todo lo que podía pasar: una boda, discursos emotivos, planes rebuscados perpetrados por rubias psicóticas y ¡A Nick le han quitado sus poderes!

Faltan muy pocos días para la boda de Monroe y Rosalee y ambas familias (y Nick, Juliette y Hank) están con todos los preparativos de la boda.

Durante el ensayo de la ceremonia, la juez de paz le pregunta a Nick si no se va a quitar las gafas durante la boda. En ese momento todos los presentes se oponen vehementemente a que Nick se quite las gafas debido a su "problema" ocular.

Más tarde, Monroe, Rosalee, los padres de Monroe, la hermana y la madre de Rosalee, Hank, Nick y Juliette están cenando en casa de Monroe. El ambiente es muy bueno y justo al final de la cena el padre de Monroe hace un discurso muy emotivo en el que se disculpa ante sus hijo y Rosalee por haberse opuesto inicialmente a la boda. Bueno, y también se disculpa ante Nick por haberle cegado los prejuicios por ser Nick un grimm.

Cuando todo el mundo se va, Monroe va a hablar con su padre para decirle que le ha gustado mucho el discurso y agradecerle que haya cambiado de opinión. Ambos se abrazan bastante torpemente, pero es una escena muy bonita porque padre e hijo por fin sellan su reconciliación.

Sin embargo, pronto se encuentran con otro problema. Diada, la hermana de Rosalee, a la que hemos visto durante la cena con alguna copa de más, termina de emborracharse del todo y destroza el vestido de novia de Rosalee.

Es el mismo vestido con el que ella se casó dos veces y no quiere que su hermana tenga la misma mala suerte en su matrimonio. Por eso ha decidido destrozarlo.

Esto hace que Rosalee, su madre y los padres de Monroe vayan corriendo a la mañana siguiente a comprar un vestido de novia. En el escaparate de la tienda hay un vestido precioso pero demasiado caro para el presupuesto de Monroe y Rosalee.Sin embargo, el padre de Monroe se ofrece a pagarlo. Parece que el problema del vestido está solucionado.

Por otro lado, por fin sabemos lo que Victor le pidió a Adalind como condición para que le devolviera su bebé y no es ni más ni menos que arrebatarle sus poderes a Nick.

Para ello traza un plan extremadamente rebuscado en el que prepara una poción para hacerse pasar por Juliette para poder acostarse con Nick y robarle sus poderes.

Sin embargo, el plan es más complicado (y más absurdo, y más cargante... en fin todo lo que normalmente es Adalind) de lo que podría parecer ya que incluye una visita de Adalind al capitán Renard haciéndose pasar por Juliette en la que le hace ver que todavía tiene sentimientos por él y termina besándole.

Luego Adalind llama a Juliette para decirle que Renard parece obsesionado con ella y se ofrece a prepararle una pócima, algo que, evidentemente, Juliette rechaza.

A continuación Renard llama a Juliette para declinar sus avances, algo ante lo que Juliette se queda estupefacta y niega haber ido a ver a Renard.

Esto hace que Renard empiece a sospechar, vaya al almacén donde Adalind guarda las cosas de su madre y descubra la poción que había preparado Adalind y su objetivo.

Renard va a avisar a Nick, llevando una poción que él mismo ha preparado y que contrarresta la fabricada por Adalind. Sin embargo, Nick ya se ha ido a la boda y solamente queda Trubel en la casa.

Renard le cuenta a Trubel lo que pasa  pero cuando va a salir de la casa para coger su coche y llevarle la poción a Nick, aparece el agente del FBI a sueldo de Victor y le pega cuatro tiros.

El agente del FBI entra en la casa para eliminar a Trubel, que ha presenciado toda la escena. Pero cuando va a atacarla, ya en forma wessen, el agente del FBI se da cuenta de que Trubel es un grimm.

Trubel lucha contra el esbirro de Victor y termina decapitándolo. Posteriormente, llama a la policía avisando de que Renard ha sido disparado y va corriendo al lugar donde se celebra la boda para darle la poción a Nick.

Hablando de Nick, él y Juliette se han dado cuenta de que la mujer con la que Nick se acostó no fue ella sino Adalind. Esto provoca su crisis de pareja tres millones y la queja de Juliette acerca de que el hecho de que Nick sea un grimm sólo les ha traído disgustos.

Ya en el lugar de la ceremonia, Nick se da cuenta de que ha olvidado sus gafas de sol. Sin embargo, el padre de Monroe salva la situación al prestarle a Nick las suyas. Las gafas son graduadas y Nick no ve muy allá, pero ve lo suficiente para poder manejarse. Y mejor andar un poco ciego que montar el espectáculo en la boda de Monroe.

Por otro lado, Wu llega a casa de Nick para atender a un moribundo Renard y en la habitación de Trubel ve uno de los libros de mitología wessen de Nick. En concreto, ve la página correspondiente al wessen que le atacó a él (demasiada coincidencia, ¿no?).

La boda es muy bonita, Rosalee está preciosa y los votos que intercambian ella y Monroe son muy, muy emocionantes.

Todo va estupendamente hasta que Trubel se presenta allí para avisar a Nick y todos los wessen se soliviantan. Además, a Nick se le caen y se le rompen las gafas de sol con lo que el problema es doble (o no).

Hank, Juliette, Rosalee, Nick y Monroe sacan a Trubel de la instancia principal. Es en ese momento cuando Nick se da cuenta de que no ha visto a los wessen en su estado real a pesar de que todos les dicen que se habían transformado.

Monroe se transforma para verificar si es cierto que Nick no puede ver a los wessen en su forma real y, efectivamente, Nick parece haber perdido temporalmente sus poderes, algo que confirma Trubel según lo poco que le pudo contar Renard.

Finalmente, vemos a Adalind tomar un avión rumbo a Viena, donde espera reencontrarse con su hija y a Renard luchando por su vida, teniendo todo el asunto muy mala pinta.

El episodio me ha gustado pero de todo el plan rocambolesco de Adalind implicando a Juliette, Renard y Nick me ha sobrado la mitad. De hecho, todo lo de hacerse pasar por Juliette ante Renard y llamar a Juliette una y otra vez me ha resultado absurdo e irrelevante. Pero claro, Adalind y Juliette son los dos personajes que menos me gustan de esta serie de largo y verles tener tantísimo protagonismo en un episodio me ha saturado bastante.

Toda la parte de la boda ha sido preciosa. Bueno, la boda y el ensayo de la ceremonia y la cena anterior. Las familias me han resultado adorables y el detalle de la hermana de Rosalind destrozando el vestido me ha resultado gracioso (y el comentario de Monroe tranquilizando a Diada diciéndole que el vestido no les gustaba nada a ninguno, todavía más gracioso).

Todas las interacciones entre Monroe y su padre (y sobre todo el discurso del padre disculpándose con su hijo, su futura nuera y Nick) han sido de mis escenas favoritas del episodio.

El pobre Renard me ha resultado poco espabilado para lo que es él y justo cuando empieza a volver en sí van y le disparan. Espero que no muera. A pesar de lo mal que le han utilizado esta temporada, el capitán Renard es uno de mis personajes favoritos y me daría mucha pena no verle más en la serie.

La relación Trubel/Nick me sigue gustando mucho. Ver a Nick haciendo de "hermano mayor" de Trubel es una de las mejores cosas que ha aportado la presencia de Trubel a la serie.

Y luego está lo de Juliette. A ver, entiendo que todo el asunto wessen y sus ramificaciones le supere. Pero si va a estar quejándose  y haciéndose la martir todo el tiempo lo mejor que podría hacer es dejar a Nick y empezar de cero. Que se haya enfadado con Nick por haberla engañado cuando el pobre Nick pensaba en todo momento que estaba con su novia ha sido irracional y desagradable.

En fin, veremos qué hacen la temporada que viene y cómo resuelven todo el asunto de la pérdida de poderes de Nick (que, evidentemente será temporal)

LO MEJOR: cualquier cosa relacionada con la boda

LO PEOR: Adalind, Juliette y cualquiera de sus escenas

PUNTUACIÓN: 8/10