(contiene spoilers)
Episodio típico de Castle centrado exclusivamente en el caso de la semana pero que a mi personalmente me ha encantado.
No ha habido avances en la trama de la pérdida de memoria de Castle, no ha aparecido ningún villano con malas intenciones para con nuestros protagonistas pero ha desprendido ese encanto tan típico de esta serie y de sus personajes.
El episodio empieza con Castle y Beckett leyendo sus tablets en casa (parece que Beckett se ha instalado definitivamente en el apartamento de Castle), pero no parecen muy entretenidos.
Beckett le propone a Castle que hagan algo esa noche y tras descartar ver una película, otra vez, la conversación toma otros derroteros y ambos terminan admitiendo que echan de menos estar juntos íntimamente pero ninguno de los dos lo había propuesto porque pensaba que el otro no estaba preparado.
Una vez ponen en conocimiento del otro el asunto, Castle y Beckett intentan empezar a recuperar el tiempo perdido y aquí la palabra clave es intentan porque como todos sabíamos una llamada les interrumpe. Estas interrupciones continuarán a lo largo de todo el episodio.
La llamada les avisa de que han encontrado a un joven muerto en su piso y que tienen que presentarse en la escena del crimen (algo que les hace muy poca gracia a ambos).
Al llegar al piso de la víctima y ver el cadáver y los aparentes gustos del muchacho (un joven de unos 25 años), Castle llega pronto a la conclusión de que el asesino es el demonio. Algo en lo que se reafirma cuando el jefe de la víctima (que se dedicaba a jugar al billar en un establecimiento de juegos a tiempo parcial) les dice que el chico le dijo que pronto vendrían a por él.
Eso si, Castle más adelante cambia de sospechoso y decide que el asesino fue el hombre invisible (sobre todo desde que "alguien" al que no veían estuvo a punto de matarles a Beckett y a él).
Sin embargo, a lo largo de la investigación, el caso dará un giro brusco tanto en la percepción de la víctima como del motivo de su asesinato.
Cotejando el informe de llamadas del fallecido, el equipo encuentra un número que se repite mucho y que resulta ser el de una bióloga marina, novia de la víctima.
La chica les informa de que el chico estudió en el MIT hasta que sufrió una crisis nerviosa y tuvo que dejarlo. Antes de la crísis eran pareja y hacía poco él la había llamado para hablar con ella de la posibilidad de recuperar sus estudios y habían retomado su relación.
Además, el vecino del chico les dice que iba todos los días a trabajar. Sin embargo, su trabajo principal en teoría era el de asesor de una empresa que no tenía sede en Nueva York, con lo que el lugar al que iba la víctima todos los días, en teoría a trabajar, resultaba un misterio.
Finalmente, se descubre que Castle no iba demasiado desencaminado con sus teorías ya que la víctima trabajaba para el gobierno en un proyecto secreto que no estudiaba la invisibilidad, como pensaba Castle en un principio, sino métodos de camuflaje.
El gobierno le había reclutado mientras trabajaba en el MIT y utilizaron como tapadera la crisis nerviosa (que en realidad no sufrió) para sacarle de la universidad y ponerle a trabajar en el proyecto.
En un principio, el equipo piensa que el asesino es el vecino de la víctima, hacker profesional y que había colaborado con el chico muerto en la investigación de técnicas de camuflaje.
Esta teoría empieza a tomar fuerza cuando se descubre que un antiguo amigo y socio del vecino de la víctima (que le había robado una idea) había recibido una paliza, aparentemente propinada por un hombre invisible.
Sin embargo, el vecino dice ser inocente, algo que finalmente resulta ser verdad, ya que la asesina y la persona que intentó matar a Castle y Beckett fue la novia de la víctima. Su motivo, el que el chico la había dejado sin ninguna explicación. Como estaba furiosa, utilizó el traje que había diseñado su novio con la técnica de camuflaje para matarle.
En otro orden de cosas, nos enteramos de que Ryan se está sacando un dinero extra trabajando como protector/guardaespaldas de strippers masculinos. Espósito no puede parar de reir cuando Ryan le cuenta el motivo de los arañazos que tiene en los brazos. Proteger a los strippers es casi más peligroso que ser policía.
Al final del episodio, Castle le dice a Beckett que tienen el apartamento para ellos solos ya que su madre y Alexis no van a estar esa noche. Parece que por fin van a poder recuperar la intimidad perdida.
El episodio me ha gustado mucho aunque no ha sido nada del otro mundo ni ha avanzado la trama de ninguna manera. Pero ha tenido tanto encanto, Castle y Beckett han estado tan adorables y Ryan y Espósito tan graciosos que se me ha pasado el capítulo volando.
Toda la parte de Castle y Beckett intentando irse a la cama, siendo interrumpidos una y otra vez, me ha parecido muy graciosa. En este episodio Nathan Fillion y Stana Katic han tenido muchísima química, sobre todo en la escena en la que Martha les interrumpe cuando intentaban consumar.
Eso si, el episodio funciona bien como un stand-alone porque Castle y Beckett necesitan hablar largo y tendido de su relación y de lo que ha supuesto para ella la desaparición de Castle.
El caso de la semana tampoco ha sido especialmente memorable, pero ver a Castle pensando que el asesino es el demonio y más tarde el hombre invisible no tiene precio. Nathan Fillion ha sacado a relucir en este episodio todo su carisma y encanto al interpretar a Castle.Algo que echaba de menos y que es una de las señas características de la serie.
Toda la subtrama de Ryan como protector de strippers masculinos ha sido genial. Me ha encantado Espósito, primero echándole la bronca por la posibilidad de que pudiera engañar a Jenny y luego riéndose abiertamente de él cuando ha conocido lo que realmente está haciendo Ryan por las noches. Me encantan Ryan y Espósito.
Algo que no me ha gustado del episodio es que Martha, Lainey y la capitana Gates han aparecido en dos escenas escasas y Alexis directamente no ha aparecido, pero por lo demás muy, muy entretenido.
LO MEJOR: La serie ha destilado encanto en todos los minutos del episodio
LO PEOR: En el episodio no ha pasado realmente nada de relevancia
PUNTUACIÓN: 9/10
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